Son las 44 calles de Barcelona en las que MRW y Seur no reparten. Los barrios de Besòs-Maresme y el Raval tienen áreas delimitadas en las que las empresas de mensajería no entregan paquetes: hay que ir a las oficinas a recogerlos. ¿Por qué? Por su nivel de conflictividad, que pone en riesgo a los repartidores.

Según ha contado Voz Pópuli siguiendo el hilo de las informaciones publicadas por este medio, las vías en las que las firmas de mensajería ya no entran se reparten en 42 en el barrio de Besòs-Maresme, fronterizo con Sant Adrià de Besòs, y 2 en el Raval, en el casco antiguo de Barcelona. Según el medio, el motivo por el que los repartidores de estas compañías no ponen un pie en estas zonas es el miedo a los robos. Cualquiera que fuere el motivo, a estas áreas de conflictividad se le unen otras, como La Mina, en Sant Adrià, o Sant Roc, en Badalona, ambas con un tejido social complejo.

En el Raval, en zona de narcopisos

Concretamente, MRW ya no reparte paquetes en las calles Albania; Alcamo; Alfons el Magnànim --vía que actúa de frontera, tal y como avanzó este medio--; Arnau Bargues; Bermejo; Bernat Metge 2 y 9 hasta final; Catania, Constantinoble; Croià; Epir; Felip de Malla; Ferrer Bassa; Galba; Guillem Sagrera; Joan de Palomar; plaza Juliana Morell; Lluis Borrassa; Marsala; Mestre Alfonso; Mestre Aloi; Muret; Narbona; Oristany; Otranto; Pau; Pere Blai; Pere Joan; Pere Olle; Perpinyà --que divide Barcelona con Sant Adrià--; Prada; Reixac; Rodes; Rois de Corella; Sasser, Sibiudas; Tarba, Tarent; Tessalia; Teulada; Tolosa; Trapani y Xipre.

En el casco antiguo de la capital catalana, las zonas en las que sí presta servicio Seur pero no entrega paquetes son las calles l'Aurora y Sant Pacià. Cabe recordar que estas dos vías fueron epicentros de la crisis de los narcopisos antes de que una cadena de operaciones policiales, que arrancó con la Operación Bacar en 2018, extirpara el fenómeno de los pisos-supermercado de droga. Quedan también muy cerca ambas zonas de los jardines de Sant Pau del Camp, desalojados recientemente por Mossos y Guardia Urbana de Barcelona por ser un punto caliente de criminalidad e incivismo.

Los Mossos lo tildaron de "rumores"

El mapeado de las calles en las que MRW y Seur no reparten por ser zonas conflictivas llega después de que los Mossos d'Esquadra tildaran de "rumores" [ver aquí] las informaciones sobre áreas en las que las firmas de paquetería y mensajería tienen servicio, pero no reparten. Igualmente, medios como Eldiario.es, El País o La Vanguardia hicieron lo propio, sin cerciorarse de que, por ejemplo, MRW lo confirma en su propia página web [ver aquí]. También criticaron estos medios a la portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, por una iniciativa presentada al pleno del Congreso de Diputados en la que, finalmente, la formación retiró la cita a las compañías de reparto.

Ajenos a esta tormenta política, los vecinos del Besòs llevan desde el 17 de agosto en franca revuelta contra el abandono del barrio y el repunte de criminalidad. Salen en manifestación con cazuelas cada noche, y en algunas ocasiones se han desplazado hasta La Verneda, donde los residentes están montando guardia contra la okupación conflictiva de los locales comerciales. Preparan los organizadores manifestaciones en septiembre para que se escuche la voz de la Barcelona olvidada.