La Cámara de Comercio de Barcelona ha advertido este viernes de los efectos negativos que pueda tener para la evolución económica de la ciudad y su área metropolitana la falta de suelo logístico disponible. Señala que este problema inmobiliario “compromete” que se puedan captar más centros de distribución “de escala regional europea” que tengan impactos positivos para la economía local.
Superar la crisis también implicó que el incremento de la actividad económica requiriera el alquiler de nuevas naves. Si a eso se le suma la necesidad de almacenaje del comercio electrónico, cuyas ventas están en auge, se ha llegado a una situación de “agotamiento” del suelo disponible.
Promociones sin suelo
La organización de dinamización industrial local señala que la desaceleración que se empieza a notar a escala mundial ha impactado de forma muy limitada sobre la logística europea.
El mercado inmologístico se ha repartido los productos que se habían quedado vacíos y los precios del alquiler han crecido. Se ha recuperado el interés en la construcción, otra de las palancas de la expansión económica de los últimos meses en todo el país, pero los operadores interesados en iniciar nuevos proyectos se estrellan contra la imposibilidad de encontrar una ubicación, lamenta la Cámara.
Colapso de CILSA
Más, por el dinamismo que el sector ha tenido en los últimos dos años. CILSA, la empresa del Puerto de Barcelona que se encarga de gestionar esta actividad, ha formalizado operaciones por valor de más de 271.000 metros cuadrados de nuevas naves que ocupan “operadores de primer nivel nacional e internacional”. Esta cifra incluye las dos transacciones que se han anunciado esta semana, la instalación de nuevos enclaves para Lidl y Decathlon.
O, lo que es lo mismo, que se invertirán 150 millones de euros en nuevos desarrollos que se ejecutarán entre el ejercicio en curso y el año próximo. La mayoría de las entregas de las nuevas naves se realizarán en 2020. Cuando se entreguen estas llaves, la ZAP Port se quedará sin suelo disponible.
Segunda y tercera corona
¿Por dónde podría crecer el área metropolitana? La Cámara de Comercio de Barcelona, liderada por Miquel Valls, destaca que Aena quiere poner en valor los terrenos más cercanos al aeropuerto Barcelona-El Prat. Cuando esto suceda, los operadores que quieran instalarse en la zona deberán ubicarse en la “segunda y tercera corona”.
Se advierte de que la “gestión urbanística a nivel municipal es compleja” para incorporar nuevo suelo en estas localizaciones. Algo que considera que se debería superar.
Planes urbanísticos locales
Reclama “dotarse de una oferta de suelo coordinada, organizada y que permita ofrecer soluciones globales y proyectos llave en mano en un tiempo razonable”. Todo ello, con una “rentabilidad adecuada” que permita atraer a inversores internacionales.
La Cámara de la capital catalana señala que es necesario iniciar sin demora nuevos desarrollos logísticos “cerca de los grandes centros de consumo”. No vale cualquier proyecto. Debe incluir naves con una “medida razonable” y que tengan la posibilidad de “conectar con transportes alternativos a la carretera”.
Elecciones municipales
La institución asegura que “Barcelona está en condiciones de actuar como centre logístico multinacional” y que actúa y puede ampliar su situación de convertirse en la “base para equipos comerciales de empresas extracomunitarias” con ventajas respecto a otras regiones de Europa. Pero este potencial se debe traducir en planes estratégicos para habilitar nuevos polígonos logísticos.
Este objetivo debe implicar acuerdos municipales que no se deben demorar en el tiempo si no se quiere llegar a la situación de estrés que advierte la institución. Todo ello, en los albores de una campaña electoral que se prolongará hasta las elecciones de mayo.