BComú, el partido de Ada Colau, notificará al resto de partidos que están representados en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) que se ha recrudecido sobre el papel el conflicto que mantiene con la empresa mixta que se encarga de suministrar agua potable en los 36 municipios que forman parte de esta Administración. La guerra del agua regresa de esta forma a la actualidad cuando falta poco más de medio año para que se celebren las elecciones locales.
Desde la propia AMB tildan de electoralista los nuevos anuncios de la vicepresidencia de Medio Ambiente de la institución, encabezada por uno de los colaboradores más próximos de Colau, Eloi Badia. Este martes explicitará que pone en marcha el “expediente para la modificación del acuerdo marco 2014-2018” que se mantiene con la empresa de abastecimiento, tal y como consta en el orden del día de la sesión al que ha tenido acceso Crónica Global.
Fórmula matemática de estabilidad
Este documento es un contrato que se debe renovar cada cinco años. Fija una fórmula matemática que se usa de forma habitual en concesiones públicas relacionadas con el agua con el objetivo de que el precio del servicio se mantenga lo más estable posible para el usuario final. La empresa encargada del suministro y la Administración que licita intentan prever qué elementos pueden incidir en el precio del agua en un quinquenio y limitar la fluctuación de la tarifa.
BComú ha intentado eliminar el acuerdo que decae el próximo 31 de diciembre en otras dos ocasiones. La primera la inició la teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad del Ayuntamiento, Janet Sanz, a principios de la actual legislatura a pesar de no tener competencias en la materia. Badia impulsó un nuevo intento para eliminarlo a principios del ejercicio en curso que se saló con la constitución de una comisión de trabajo entre el AMB y la empresa mixta que debía desarrollar el acuerdo marco que se prolongará de 2019 a 2024.
Falta de negociación
Así se pactó antes de las vacaciones de verano tras un cruce de alegaciones entre la vicepresidencia del AMB y la compañía de abastecimiento. Pero este órgano de debate sólo se ha reunido en una ocasión, en septiembre. Allí todas las partes pusieron sobre la mesa sus grandes objetivos para abordar una negociación que nunca se inició.
Dos meses más tarde, Badia ha decidido levantarse de este espacio y anunciar que de forma unilateral su equipo en la vicepresidencia empezará a desarrollar un nuevo acuerdo marco quinquenal. Da 15 días a la compañía para que presente las alegaciones que considere oportunas.
Pugna por las tarifas
Lo hace el mismo día en que también anuncia que no piensa trasladar a la Comisión de Precios de la Generalitat el expediente de tarifa que le ha hecho llegar la empresa de abastecimiento, participada por Aigües de Barcelona (70%), Criteria (15%) y la propia AMB (15%).
Se pedía elevar el coste del servicio el 4,1%, aunque BComú mantiene que la compañía mixta ha recibido 31 millones de euros más de los que había presupuestado de ingresos para 2018 y que esto supone una desviación que impediría la revisión al alza. Hecho que abre la puerta a otro pulso con la empresa de abastecimiento.
Se une a los expedientes que también se han abierto en el que se ponía en duda la valoración de los activos de la compañía y el contrato concesional. Aunque todos los informes que Badia encargó y presentó en este sentido se han quedado en titulares, según los mismos interlocutores de la AMB. “BComú hace bandera con una línea ideológica, la de intentar decir que hacen frente a las multinacionales”, señalan los mismos interlocutores.
Resolución del Supremo
Destacan que, en el terreno práctico, a parte de las constantes demandas de información a la empresa afectada sólo ha llegado a lo factual la apertura de un expediente sancionador por la presunta falta de transparencia en la gestión. Aunque aún está abierto.
Las fuentes consultadas indican que más allá de hacer política con la guerra del agua, las demandas de Badia quedan supeditadas a una resolución del Tribunal Supremo que se espera en el corto plazo. Los magistrados deben pronunciarse sobre el proceso de constitución de la empresa mixta que ya fue enmendado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). Apuntan a que todas las medidas impulsadas por BComú pueden quedar en papel mojado con esta sentencia. Con todo, el partido sí podría obtener algún rédito electoral.