Taxistas de Barcelona: barricadas de fuego y la ciudad colapsada. Los conductores han prendido neumáticos en los accesos a Barcelona y han bloqueado algunas de las principales arterias de tráfico rodado a la Ciudad Condal en una protesta espontánea hoy viernes, 27 de julio.
La violenta movilización sigue a la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), tomada también hoy, de mantener suspendido el reglamento metropolitano que pone coto a las licencias VTC, los permisos que usan Uber y Cabify.
Ello ha provocado la ira de los conductores, que han reanudado unos paros que ya realizaron el miércoles, 25 de julio, y el jueves 26, en defensa de la norma que impone la doble licencia urbana a las plataformas de transporte.
C-31, Gran Vía y calle Aragón, las más afectadas
Entre las vías más afectadas están la C-31 en dirección al aeropuerto de El Prat, que ha sido cortada por conductores, primero, y con una barricada de neumáticos ardiendo, después. Ha reabierto sobre las siete de la tarde. En paralelo, centenares de conductores están bloqueando la Gran Vía de Barcelona con sus vehículos y a pie.
Otro grupo de conductores ha bloqueado la calle Aragón de la capital catalana con contenedores. La Guardia Urbana ha desviado el tráfico a la altura de la calle Bruc.
Situación descontrolada
La protesta de los taxistas ha llegado horas antes de que el colectivo se reúna con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para buscar una solución al conflicto que mantienen con los vehículos que operan con permisos de vehículos de alquiler con conductor (VTC).
Aunque el encuentro estaba programado a las seis de la tarde, y los conductores habían prometido iniciar un paro indefinido después del mismo, algunos conductores no se han esperado y han empezado las movilizaciones antes de la reunión bilateral.
Las protestas han provocado la ira de muchos conductores, que han lamentado que coincida con el primer día de la Operación Salida de verano, durante la que se prevén 45 millones de desplazamientos en España.