Barcelona, la ciudad preferida para los críticos gastronómicos pero no para los turistas

Barcelona es el destino español preferido de los críticos gastronómicos, pero ya no lo es para los turistas.

La situación de incertidumbre política y los atentados del 17A han contribuido a que Cataluña deje de ser, por el momento, uno de los epicentros de los viajes gastronómicos. Sin embargo, la ciudad sigue siendo la más valorada por los críticos especializados. De hecho, es la urbe española que cuenta con más estrellas Michelin, un total de 41, frente a las 28 que ostenta Madrid, por ejemplo.

Pintxos en San Sebastián, la ciudad gastronómica preferida por los españoles

Galicia, la preferida

En detrimento de Cataluña --que hasta hace poco tiempo se encontraba en el top 3 de las autonomías más valoradas--, se sitúan Galicia, el País Vasco y Asturias. Así lo apunta el II Estudio de la Demanda de Turismo Gastronómico en España que hace la consultora Dinamiza. Cataluña se encuentra ahora en décima posición, según la valoración del turista gastronómico y en la última del turista generalista español.

Por ciudades, San Sebastián encabeza el ranking de preferencias, como recoge Tripadvisor. Le siguen Madrid, Barcelona, Logroño, Bilbao y Zaragoza.

Un sector muy variable

Los viajes de gastronomía son una actividad muy volátil, pero nada estacional que favorece la repetición de la experiencia. “Son una forma de viajar frecuente y de corta duración", explica el director de Dinamiza, Manuel Romero. Habitualmente, el perfil del visitante suele ser “de la misma región o de una cercana, pero no recorre más de 200 kilómetros por norma general”, señala.

Este tipo de escapadas se asocian al romanticismo. Un 60% de los españoles las reserva en pareja, mientas que el 40% restante apuesta por viajar en familia: “Visitan un lugar especifico y se trasladan en coche, no suelen utilizar otro medio de transporte alternativo”, explica Romero.

Una experiencia diferente

La mayoría de estos turistas se focaliza en la gastronomía del lugar para planificar su estancia y suelen alojarse “en hoteles de cuatro estrellas para completar unas minivacaciones gourmet”.

Imagen de una pareja degustando vino

Los lugares con más éxito desde el punto de vista de las reservas son "los que apuestan por descentralizar el turismo y por la sostenibilidad". "Se pueden vivir experiencias diferentes en cada estación del año según el paisaje y patrimonio gastronómico que se elija", indican desde Dinamiza.