Pulseras por la unidad: el merchandising ya no es solo 'indepe'

La situación política que se vive en Cataluña ha propiciado que muchos españoles hayan querido mostrar su apoyo a favor de la unidad de España. Una de las últimas iniciativas que van en esta dirección es la de tres jóvenes madrileños que han ideado una pulsera que junta la bandera nacional y la senyera para demostrar que “la mayoría creemos en la unión”.

La iniciativa llama la atención porque se trata de uno de los primeros proyectos que une el merchandising con la solidaridad, algo que hasta la fecha parecía monopolio exclusivo del universo independentista. Sin embargo, en ningún caso la rentabilidad económica es su principal objetivo: la pulsera tiene un precio de 3,95 euros que puede bajar en función de las unidades que se compren. La motivación principal es apelar a todos aquellos ciudadanos partidarios de la unidad. El complemento se puede adquirir a través de su página web Creo en España.

“Es un símbolo de unión. Para decirle a los catalanes que no están solos, que pueden contar con nosotros”, explica uno de sus promotores a Crónica Global. Detrás de esta idea puesta en práctica hace apenas dos semanas, hay dos ingenieros y un economista de 26 años. Prefieren mantenerse en el anonimato porque este proyecto forma parte de su faceta personal, como ciudadanos preocupados por la situación política de Cataluña. Los tres tienen empleos fijos en sus respectivos sectores y no militan en ningún partido político.

Madrileños que venden en Cataluña

Desde su lanzamiento han vendido unas 160 unidades, pero esperan “llegar a miles” haciendo “viral” la idea. “Esta pulsera es para tejer la bandera más larga del mundo”, añade el joven madrileño. Y es que cada una lleva inscrito un número para que, al final, se pueda saber cuánta gente se ha unido a la causa.

precio pulseras

El precio de las pulseras descienden en función del número de unidades

Pese a estar en Madrid, su mayor número de ventas se están produciendo en Cataluña. Esta repentina notoriedad también ha comportado la reacción de las redes sociales: “Tenemos muchas críticas de los independentistas, pero eso nos hace más fuertes”, arguye optimista.

El 50% de los beneficios se destinarán a asociaciones sin ánimo de lucro todavía sin determinar. De momento están ultimando este detalle ya que no esperaban que las ventas se produjeran desde el primer día.

Un fenómeno social

En momentos de crisis políticas suelen eclosionar iniciativas desde la sociedad civil para recuperar la ilusión o esperanza perdida. El sociólogo especialista en marketing, Moisés Alonso, lo resume así: “Tenemos la necesidad de sentirnos parte de un grupo y, en este momento, el más importante a nivel político es la nación”.

Se trataría, en primera instancia, de un fenómeno social. Pero esto no excluye, a juicio del sociólogo, la vertiente económica del mismo: “Nos segmentamos según nuestra ideología, nuestros sentimientos y nuestras costumbres. Consumimos, ya sea un producto o un símbolo nacional”.

Alonso destaca que estas iniciativas suelen surgir de la ciudadanía: “Ahora hay cierta sensación de que los políticos no están a la altura de las circunstancias por diferentes razones, y los ciudadanos que más afectados se sienten por el conflicto territorial se movilizan”. Algo que, sin duda, parece ajustarse al caso de estos tres chicos madrileños comprometidos con sus conciudadanos catalanes.