Imagen de archivo de un vehículo de Cabify, el gran rival de Uber, en Barcelona / CG

Imagen de archivo de un vehículo de Cabify, el gran rival de Uber, en Barcelona / CG

Business

Los rivales de Uber se desmarcan de la resolución de Luxemburgo

Cabify asegura que sus licencias VTC le dan carta blanca para operar, mientras que SocialCar, BlaBlaCar y Drivy señalan las diferencias con su modelo de negocio

12 mayo, 2017 00:00

La resolución del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TSJUE) sobre Uber impacta en todo el sector. Los principales operadores mantienen que los servicios que prestan en el marco de la llamada economía colaborativa son difíciles de limitar por ley. Tras la crítica, se acogen a las diferencias con el modelo de explotación de la multinacional estadounidense para desmarcarse de la decisión dictada en Luxemburgo.

Cabify, el gran rival de Uber en todo el mundo, ha asegurado que el servicio que presta en Madrid y Barcelona es absolutamente legal. El director general de la compañía, Oriol Sanleandro, ha asegurado en el salón del automóvil que arrancó este jueves en la capital catalana que la compañía se ha “ceñido siempre a las reglas, a jugar siguiendo las reglas vigentes no sólo en España”.

Licencias VTC

Mantiene que las licencias VTC de su flota de vehículos son suficientes para permitirles la circulación. Este tipo de normativa autoriza la circulación de un coche con conductor privado sólo si se ha contratado el servicio de forma previa, hecho que comporta un precio cerrado del servicio que se comunica al usuario antes de iniciar el trayecto.

“Entendemos perfectamente el enfado de los taxistas cuando [Cabify] empezó a operar”, indica Sanleandro. En ese momento, no se contaba con la licencia VTC, por lo que el ejecutivo “entiende” la oposición con la que se encontraron. “Ahora están contentos”, declara, aunque la compañía mantiene litigios abiertos en las ciudades en las que opera por los incidentes con taxistas.

Libertad de elección de servicios

El último, y el más sonado, fue la quema de vehículos en la Feria de Abril. Sanleandro señala que se trata de un suceso aislado y confía en que la investigación abierta por las autoridades identifique en breve a los culpables.

Cabify, en el momento actual, reclama a la Administración más VTC. “La gente está contenta por disponer de una alternativa, por poder elegir entre ir en taxi o probar otro servicio”, argumenta.

“Lo importante es disponer de alternativas, que todos podamos elegir libremente y que sean los propios servicios los que se ganen el cariño de la gente”, concluye.

Sectores liberalizados

Los otros grandes del sector miran con mayor distancia la resolución del TSJUE. SocialCar y BlaBlaCar recuerdan que su papel es el de gestionar el alquiler de vehículos entre particulares y el de compartir trayecto (con la correspondiente comisión por intermediar).

Jaume Suñol, director en España para Drivy, señala que el sector del alquiler de vehículos particulares es un “área que se liberalizó en 2009”, por lo que no han topado con problemas judiciales. “Los propietarios de un coche lo pueden alquiler siempre y cuando lo contemplen en la tributación”, afirma.

Adaptación de la regulación

Mar Alcorcón, la consejera delegada y presidenta de la primera, manifiesta que el alto número de usuarios doblegará finalmente la regulación actual por la demanda del mercado.

Jaime Rodríguez, director en España y Portugal de BlaBlaCar, es el que ha cargado de forma más directa contra Uber al asegurar que la decisión del tribunal clarifica que no es un servicio para compartir vehículo. Por lo que debe cumplir otras exigencias normativas.