Miquel Martí, presidente de Moventia y miembro de la patronal independentista Femcat, es desde esta semana el candidato para relevar a José Luis Bonet en la presidencia del consejo de administración de Fira Barcelona. Lo será porque el resto de aspirantes a uno de los cargos con mayor proyección público-privada en Cataluña ha declinado asumir la responsabilidad en el contexto actual. Básicamente político. Y lo han hecho entre bambalinas, como es tradicional en esta institución.
Era Luis Conde, fundador de la firma de búsqueda de directivos Seeliger y Conde, una de las figuras más conocidas del empresariado catalán y próximo al PP, su principal rival para recoger el testigo de Bonet. Se posicionó para el relevo hace tres años, pero el escenario en el que se desenvolverá el próximo presidente de Fira Barcelona ha cambiado de forma sustancial desde ese momento. Por ello decidió borrarse de la terna, según fuentes de su entorno.
Fontana y Villarubí
Algo parecido a lo que ocurrió con Pedro Fontana, director general de Elior Concesiones. La nueva etapa de Áreas en el gigante francés le obliga a estar más en París que en Barcelona, la excusa perfecta para dar un paso al lado. Con todo, se da por sentado que renovará en el órgano de administración de la Fira.
Carles Vilarrubí, responsable de Rothschild España y Willis C, tenía menos posibilidades de asumir el cargo de Bonet hasta que dé carpetazo a la imputación judicial que le pesa por una derivada del caso Pujol. También se entiende que continuará en el consejo de administración otro mandato. No es el único miembro de la dirección de Fira que se ha visto salpicado en una investigación por un presunto caso de corrupción.
Vocales sustituidos
El propio director general de Fira Barcelona, Constantí Serrallonga, está imputado en el caso 3%. Supuestamente, participó en la trama de financiación ilícita de CDC cuando era gerente del Ayuntamiento de Barcelona. En el mandato de Xavier Trias.
Núria Basi, Enric Crous y Enrique Lacalle deberán dejar el consejo de administración porque les vencen los mandatos. Deberán ser sustituidos.
Colau, alcaldesa de Barcelona
Bonet ha tenido que gestionar la institución los dos últimos años con Ada Colau en la presidencia del consejo general. La alcaldesa de Barcelona entró con mal pie en Fira Barcelona. Las críticas que le dedicó en la campaña electoral a la institución y a sus principales fuentes de ingreso aún están presentes entre el empresariado catalán.
Especialmente las referentes al Mobile World Congress (MWC), la gallina de los huevos de oro de Fira y el mayor escenario internacional para la ciudad en el plano internacional. Los ejecutivos catalanes aún recuerdan que la líder de BComú casi se lleva por delante el evento internacional con sus críticas a la renovación del acuerdo para acogerlo hasta 2023.
Falta de sintonía empresarial
Colau dio finalmente el visto bueno al documento en julio de 2015, pero el empresariado catalán no olvida las trabas que puso. La alcaldesa y su equipo han intentado reconducir desde ese momento la situación, pero el éxito ha sido relativo.
La falta de sintonía entre la líder de BComú y los ejecutivos catalanes es desalentador para el relevo de Bonet, según fuentes de la Fira. Pero tampoco juega a favor el momento político de la Generalitat de Cataluña.
Proceso independentista
El proceso independentista que ha iniciado CDC y ERC con el apoyo de la CUP y sus desenlaces posibles han propiciado que sólo un empresario que está muy en línea con estas tesis aceptara un reto como el de representar a la institución público-privada.
Miquel Valls, el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, ya ha propuesto el nombre de Martí al Ayuntamiento y a la Generalitat. Tiene la potestad de hacerlo como máximo ejecutivo de la organización de representación empresarial.
La gestión personal que ha hecho en esta cuestión le ha propiciado críticas de ciertos sectores de la Cámara. Miembros del comité ejecutivo se quejan que no informó de la propuesta, una cuestión de deferencia ya que no está obligado por el proceso. Aún espera respuesta de las dos instituciones políticas de Fira Barcelona.