Imagen del megayate 'Tatiana' en plena navegación. A la derecha, Liliana Godia y Manel Torreblanca.

Imagen del megayate 'Tatiana' en plena navegación. A la derecha, Liliana Godia y Manel Torreblanca.

Business

Así son las vacaciones de los ricos catalanes

La familia Godia-Torreblanca alquila un yate en Ibiza para reunir en agosto a lo más granado de la alta sociedad

23 agosto, 2015 00:00

Las grandes fortunas catalanas no reparan en gastos a la hora de disfrutar de sus vacaciones de verano. Existe la leyenda urbana de que la beautiful people catalana es más discreta y austera que la madrileña, menos amante del lujo y del glamour, pero resulta inexacta. Basta con conocer cómo Manel Torreblanca y su esposa Liliana Godia, una de las primeras fortunas de Barcelona (en seria competencia con Sol Daurella), han planteado sus vacaciones de agosto en el mar.

El matrimonio, recién salido de un proceloso contencioso con la Fiscalía y la Agencia Tributaria, ha alquilado un yate de lujo en Ibiza con el que ha recorrido durante dos semanas las aguas del Mediterráneo y en especial las playas de las islas Baleares donde se han reunido con lo más excelso de la alta sociedad, entre otros representantes del empresariado y del mundo catalán de los negocios. 

Megayate de 45 metros

Tatiana, nombre de la embarcación, dispone de 45 metros de eslora y tres pisos. Se trata de uno de los yates más grandes que atracan en los puertos de la zona y que está en alquiler a un precio que oscila entre los 150.000 y los 160.000 euros semanales. A ese importe que paga el usuario hay que añadirle el coste del combustible (consume 250 litros por hora a velocidad crucero) y los amarres que sean necesarios durante el periodo de alquiler. También, por supuesto, el IVA del alquiler y de los consumos.

Salón del megayate Tatiana.

Caro, pero con todo incluido. Desde las propias instalaciones amplias y lujosas hasta el servicio. Según ha podido saber este medio, casi unas 15 personas han formado parte de la tripulación y del servicio del acaudalado matrimonio. Los Godia-Torreblanca han pagado a Hacienda en los últimos meses más de siete millones de euros para no dar con sus huesos en un centro penitenciario tras admitir que se había producido fraude fiscal en varios impuestos durante un largo periodo de tiempo. Un pacto con la justicia permitió la escapatoria. En la querella a la que hicieron frente una de las irregularidades era que las sociedades del matrimonio se desgravaba los gastos del barco veraniego.

Medio millón por navegar 15 días

El Tatiana es uno de los chárter de alquiler más reputados del Mediterráneo y está al alcance de muy pocos bolsillos. Algunos de los visitantes del matrimonio estiman que Torreblanca y Godia han invertido unos 500.000 euros en esas vacaciones marítimas. Sin contar, añaden, el champán francés o los vinos Vega Sicilia que la pareja acostumbra a degustar en compañía de sus amistades.

Dormitorio principal del megayate Tatiana.

Todos los detalles del barco están ideados para una estancia de máximo lujo. Puede alojar a entre 12 y 14 pasajeros en 6 cabinas, 4 de ellas dobles y 2 twin. Cuenta con comunicaciones por satélite y Wifi a bordo. Los ocupantes del navío disponen incluso de una sala de cine para ver proyecciones y películas en el interior.

Sala de cine del barco Tatiana.

Xercavins y Bordas, entre los visitantes

El megayate fue diseñado por Joachim Kinder y puede recorrer los principales puertos del Mediterráneo. Donde los Godia recibieron a sus invitados, no obstante, fue en Ibiza. Por su barco pasaron empresarios y notables del círculo de los altos negocios de Barcelona.

El inmobiliario Josep Maria Xercavins fue uno de los asistentes al barco. El que fuera nombre fuerte de Metrópolis (conocida como la inmobiliaria de los ricos catalanes por los socios que la formaban) hasta verse salpicado con una queja de algunos socios por su gestión interna es habitual del entorno Godia-Torreblanca. Xercavins, junto con Enrique Lacalle y Torreblanca, forman parte del núcleo habitual de amistades del matrimonio. Los tres son integrantes del exclusivo club Puente Aéreo que reúne a personalidades del mundo empresarial de Barcelona y Madrid.

Lacalle, Torreblanca, Xercavins y Bordas, en una fiesta ibicenca.

No fue el único de los asistentes a los encuentros en el megayate. Ramón Bordas, propietario junto a su hermano Javier (directivo del FC Barcelona), del grupo de hostelería Costa Este también mantiene una intensa actividad en la isla. No en vano, los Bordas son propietarios del restaurante Nuba de la isla pitiusa. En uno de sus desplazamientos también pasó por el megayate alquilado por la familia accionista de Abertis y propietaria de las ITV madrileñas.