Una enfermera se prepara para entrar en una UCI donde se tratan pacientes de coronavirus a los que se ha hecho una PCR en el Hospital Clínic / PABLO MIRANZO

Una enfermera se prepara para entrar en una UCI donde se tratan pacientes de coronavirus a los que se ha hecho una PCR en el Hospital Clínic / PABLO MIRANZO

Vida

Salut prescinde de los laboratorios privados para desatascar el colapso en las pruebas PCR

La Generalitat desdeña la colaboración de los centros de análisis pese al estrés experimentado en los hospitales públicos

30 octubre, 2020 00:00

La Consejería de Salud rechaza la colaboración del sector privado para afrontar la crisis del Covid-19 en Cataluña. Si durante la primera ola de contagios la Generalitat hizo caso omiso de los ofrecimientos llegados des del ámbito hospitalario, ahora son los laboratorios quienes experimentan el desdén del gobierno autonómico.

Los centros aseguran no haber recibido ni una llamada del Govern. Y eso pese a los atascos en la realización de PCR sufridos en algunos hospitales como el Vall d'Hebron, donde los resultados de los test se prolongan hasta 14 días. Los analistas del equipamiento se han visto desbordados durante las dos últimas semanas por el aluvión de pruebas en este hospital de la zona norte de Barcelona. Es más, fuentes sindicales advierten de que la situación podría reproducirse en otros lugares del ámbito metropolitano durante las próximas semanas.

 

 

Marc Ramentol, secretario general de Salud de Cataluña, reconoce la saturación de PCR durante las últimas jornadas / 3/24

Los laboratorios aún tienen margen

Pero la Generalitat no da su brazo a torcer. Crónica Global ha contactado con tres laboratorios privados de la capital catalana que realizan diagnósticos de coronavirus. Ninguno de ellos muestra el mismo estrés que los hospitales públicos y sigue sirviendo los resultados 24 o 48 horas después de la visita. Un ejemplo de ello es el centro médico Mapfre Salud de Barcelona. Los portavoces de este equipamiento reconocen que ha registrado un incremento de trabajo en la especialidad de análisis clínicos, pero aseguran que no ha repercutido en demoras en el servicio y en mayor tiempo de obtención de resultados. 

Roger Garcia, director de Ergodinámica, reconoce que han notado un "repunte de la demanda" desde hace un par de semanas. Pese a ello, afirma que aún tienen cierta capacidad para asumir más pedidos. "Estaríamos encantados de colaborar porque tenemos margen para asumir más pruebas", resume. El empresario explica que la llegada de test antígenos --pruebas rápidas de 15 minutos recomendadas para personas asintomáticas-- ha aliviado la cantidad de pruebas PCR o serológicas realizadas en estos centros.

Los sindicatos auguran más picos

"No se trata un problema de personal, sino de maquinaria. Los aparatos para realizar las PCR tienen una capacidad de 90 test por hora. No se pueden hacer más en el mismo tiempo", detalla Garcia. De ahí que se puedan dar más cuellos de botella en cualquier hospital público si de golpe se reciben más peticiones. Fuentes de Csif y CGT reconocen que la situación es complicada y que nada asegura que la sanidad pública, por sí misma, pueda asumir todas las pruebas de coronavirus necesarias.

"O aumentamos recursos o recurrimos a la privada", sentencia un médico catalán. Otro interlocutor del sistema de salud público reconoce que la "elevada transmisión comunitaria de esta segunda ola" recomendaría contar con toda la ayuda posible. Aunque ambos sanitarios critican el "déficit estructural de recursos" que ha impedido reforzar la capacidad de respuesta de los centros públicos.

Sanitaria realizando una PCR para detectar contagios en Cataluña / EP

Sanitaria realizando una PCR para detectar contagios en Cataluña / EP

La tibia respuesta de Ramentol

Todos estos argumentos no parecen haber calado en el número dos del departamento de Salud. En una comparecencia el pasado martes, Marc Ramentol reconoció un "gran volumen de solicitud de prueba que en algunos días puntuales superó la capacidad de laboratorios de la red pública".

Pese a estos episodios de tensión, el secretario general de Salud aisló la coyuntura del Vall d'Hebron y se encomendó a una mejoría general de los indicadores de la pandemia. De hecho, un laboratorio consultado por este medio revela que la política del Govern va en la dirección contraria: la Generalitat ha quitado trabajo a los centros de análisis privados con los que trabaja mediante la compra de nueva maquinaria para hospitales como el Vall d'Hebron o Bellvitge.

"El sector privado y público deben coexistir"

Rosa Olmos, directora de Vidaria, señala que ambos canales, público y privado, deberían poder "coexistir" ya que satisfacen demandas distintas. "Nosotros recibimos muchas personas que se hacen la PCR porque tienen que irse de viaje, por ejemplo. No solo se trata de pacientes con síntomas. Se ha dado la idea de que todo el mundo se debe hacer la prueba en el ambulatorio y eso satura el sistema", reflexiona. Por todo ello, pide que se haga más pedagogía en este sentido.

Vidaria también ha percibido un incremento de la demanda durante las últimas jornadas --"hemos llegado a hacer 8.000 PCR a inicios de octubre"--. Con todo, la clínica cumple sin problemas con los plazos fijados para la entrega de resultados. "Hay un tipo de paciente que puede pagarse un recurso privado y desatascar así la pública. ambas se pueden armonizar", concluye.