Con la llegada de la Navidad, las ciudades de Cataluña se transforman en escenarios llenos de vida, color y tradición con sus habituales mercados navideños.
Luces que titilan en las calles, decoraciones que evocan el calor del hogar, villancicos que resuenan en el aire, espectáculos para todas las edades y rincones cuidadosamente decorados dan vida a una temporada que invita a la ilusión y el reencuentro.
Es un momento especial para locales y visitantes, quienes acuden a ciudades como Barcelona para compartir momentos inolvidables con familiares y amigos mientras se sumergen en el espíritu navideño que se respira en cada rincón.
En este contexto, los mercadillos navideños se erigen como una tradición imprescindible. Más allá de su función comercial, representan un homenaje a la creatividad y el trabajo de los artesanos locales, que con sus manos expertas elaboran piezas únicas y cargadas de significado.
Estos mercadillos no solo enriquecen las calles con sus coloridos puestos y productos exclusivos, sino que también contribuyen a fomentar el comercio local en una época marcada por el auge de las compras en grandes centros comerciales y plataformas online.
Además, invitan a disfrutar de la gastronomía, los espectáculos y las actividades culturales, convirtiéndose en un espacio de encuentro y celebración.
El mercadillo navideño más antiguo de España
Un año más, y desde 1786, ya serán 239 ediciones de la Feria de Santa Llúcia, como siempre en la Avenida de la Catedral de Barcelona, la que la vuelva a llenar de luz, ilusión y esperanza. Como es habitual, será desde el 29 de noviembre hasta el 23 de diciembre.
Se trata de la feria más antigua que gira en torno al mundo del pesebre y de las tradiciones navideñas. Por este motivo, preparan un programa especial para que los adultos y niños puedan disfrutar en familia de toda una serie de novedades, como la colocación de más de 15 árboles de Navidad iluminados.
También se está trabajando en la decoración del área donde se realizarán las actividades, que, por otra parte, se ampliarán respecto al año pasado, tanto en cuanto a la cantidad de actos como en los días y horarios.
Además, cuenta con un total de 215 paradas, es la única feria del mundo donde encontrará más de 160 espacios de venta de productos estrictamente navideños, como pesebres, figuritas, musgo, árboles de Navidad, complementos para su hogar y muchos otros.
También podrá disfrutar de más de 30 espacios dedicados a artículos de regalo, como complementos textiles, cerámica, joyería y bisutería, cuero, etc.