Ocho de cada diez mujeres en Cataluña han sufrido alguna forma de violencia machista, desde comentarios sexuales hasta violaciones. Estas cifras dibujan un panorama devastador que, lejos de remitir, se amplifica con el auge de las redes sociales y los discursos negacionistas entre la juventud.
Así lo ha alertado la comisaria Marta Fernández, responsable de Comisaría Superior de Seguridad Ciudadana (CSUSEC) de los Mossos d’Esquadra, durante las jornadas Feminicidios y otras formas de violencia grave a las mujeres organizadas por el Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (ISPC), en las que se han presentado los últimos datos y tendencias sobre feminicidios y violencia machista.
El 80% de los casos no se denuncian
La comisaria Fernández definió la violencia machista como “una vulneración flagrante de los derechos humanos” y “la manifestación extrema de una sociedad desigual” que se expresa no solo en feminicidios, sino también en control, humillaciones, violencia digital, comentarios sexuales o discriminación encubierta.
Esta violencia cotidiana y múltiple, muchas veces normalizada o silenciada, explica que las estadísticas oficiales solo capten una parte del fenómeno. En este sentido, el Gabinete de Seguridad del Departamento de Interior alerta de que entre el 70% y el 80% de los casos no se denuncian; lo que dibuja un panorama aún más preocupante.
Más de 200 víctimas mortales desde 2008
Sobre la forma más extrema y violenta de la violencia machista, los feminicidios, Cataluña ha registrado desde 2008 221 víctimas mortales entre mujeres y menores. De ellas, 179 fueron asesinadas por su pareja o expareja (168 mujeres y 11 hijos, nueve de ellos menores). Solo el 27% había denunciado previamente; apenas un 9% contaba con medidas de protección activas.
En el ámbito familiar, 42 mujeres y niños han sido asesinados desde entonces, el 76% de ellas por sus propios hijos.
Cifras de víctimas mortales por violencia machista en Cataluña desde 2008
Radiografía según la encuesta de 2021
La Encuesta de Violencias Machistas de 2021 revela:
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8 de cada 10 mujeres han sufrido algún tipo de violencia: comentarios, gestos sexuales, amenazas, tocamientos o violación.
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Aumentan las violencias sexuales perpetradas por hombres que nunca han sido pareja de la víctima.
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El 52% de las mujeres declaran haber sido víctimas de un hecho violento; de estas, 37% temen a la expareja y 12% a la pareja actual.
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El 13% de las mujeres encuestadas afirman haber sufrido relaciones sexuales forzadas y un 18% más de lesiones físicas.
Las jóvenes, las más expuestas
Entre jóvenes y adolescentes las cifras son todavía más alarmantes:
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El 50% de las jóvenes entre 16-29 años aseguran haber sido víctimas de violencia psicológica.
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El 54% afirma haber sufrida violencia sexual (sin contar comentarios).
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6 de cada 10 mujeres jóvenes han sufrido violencia digital.
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Casi el 5% de las encuestadas manifiesta haber sufrido un intento de violación y el 1,6% de una violación consumada.
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En paralelo, 1 de cada 3 menores de 15 años manifiesta haber sido víctima de al menos un episodio de violencia machista.
Al mismo tiempo, ha alertado la comisaria, proliferan discursos negacionistas. Uno de cada cuatro chicos jóvenes cree que la violencia de género es un “invento ideológico” y un 72% admite temer ser acusado falsamente de violencia sexual o machista, según el Barómetro Juventud y Género del Centro Reina Sofía.
Esta combinación de altas tasas de victimización y negacionismo creciente preocupa a la policía catalana y obliga a repensar estrategias de prevención, reconoce la comisaria Marta Fernández.
Denuncias al alza
En paralelo, los Mossos d’Esquadra constatan un aumento del 737% de las denuncias por agresiones sexuales desde 2012, así como un incremento de los casos de acoso y acoso digital (+272,5%) y de difusión no consentida de fotografías y videos íntimos (+762% más de denuncias).
Ante el aumento generalizado de las denuncias, los Mossos implantaron en 2012 un nuevo modelo de atención especializada con grupos especializados y en coordinación con actores sociales. Actualmente, estos grupos de atención a las víctimas cuentan con 224 efectivos y más de 25.000 seguimientos activos sobre violencia machista, doméstica o delitos de odio y discriminación.
Cifras de denuncias en Cataluña desde 2012
Educación y redes sociales
La comisaria alerta del impacto de las nuevas tecnologías en la producción y reproducción de la violencia machista y defiende que “la educación es la herramienta clave para contrarrestar los discursos emergentes y la desinformación”, especialmente entre los jóvenes.
Es por ello que reclama dar más voz a las víctimas, reforzar la inteligencia policial y mejorar la investigación para adaptar las políticas de igualdad a las nuevas realidades digitales y a las masculinidades emergentes.
“La violencia machista no desaparece, se readapta”, concluye Fernández. Con unas cifras negativas y un negacionismo en aumento, Cataluña se enfrenta al reto de transformar las dinámicas sociales, reforzar la protección y educar a las nuevas generaciones para frenar una lacra que sigue destrozando vidas.