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En pleno auge de medicamentos como Ozempic —un fármaco inyectable para la diabetes que también se emplea en la pérdida de peso—, el Hospital Vall d’Hebron ha participado en el desarrollo de un tratamiento oral que podría simplificar su administración y abrir una nueva alternativa en el abordaje de la obesidad.

El nuevo fármaco, conocido como orforglipron, se ha estudiado mediante el seguimiento de 3.100 personas con obesidad sin diabetes durante 72 semanas. Los resultados, publicados en la revista The New England Journal of Medicine, muestran que con la dosis más alta de este medicamento se consiguió una disminución media del 11,2% del peso corporal.

Fase 3

Según un comunicado del hospital, el ensayo clínico se encuentra en la fase 3 de su desarrollo y se ha presentado en el Congreso Anual de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD), celebrado en Viena. En los próximos meses está previsto que inicie los procesos regulatorios necesarios para su aprobación.

La investigación ha contado con Andreea Ciudin, coordinadora de la Unidad de Tratamiento Integral de la Obesidad del Hospital Universitario Vall d’Hebron e investigadora principal del grupo de Diabetes y Metabolismo del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR), como única autora europea de la publicación.

Dra. Andreea Ciudin Vall d'Hebrón Barcelona

Estudio

Las personas elegidas para participar en el ensayo residían en nueve países diferentes. En todos los casos se trataba de adultos con un índice de masa corporal superior a 30 kg/m², o de entre 27 y 30 kg/m² con alguna complicación asociada a la obesidad, como pueden ser la hipertensión, enfermedades cardiovasculares o apnea del sueño.

Cada participante fue asignado aleatoriamente una dosis diferente de orforglipron (6 mg, 12 mg o 36 mg) o una pastilla placebo, en forma de cápsulas diarias. El fármaco también se combinó con recomendaciones de dieta saludable y actividad física.

La mitad de quienes tomaron la dosis más alta (36 mg) lograron perder al menos el 10% de su peso corporal, y un 18% alcanzó una reducción superior al 20%. Más allá del peso, también se observaron mejoras en la presión arterial, así como en los niveles de triglicéridos y colesterol. Por lo que, podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Efectos adversos

A partir del estudio también se identificaron efectos adversos por la toma del orforglipron. En la mayoría de los casos eran digestivos, generalmente leves o moderados y autolimitados. Estos son bastante comunes en otros fármacos aprobados para tratar la obesidad.

A diferencia de los tratamientos actuales, que presentan limitaciones en su forma de consumo —algunos requieren inyección y otros deben tomarse en condiciones estrictas, como en ayunas o bastante antes de las comidas—, orforglipron puede administrarse en cápsulas sin estas restricciones.

Este fármaco es similar a la semaglutida (conocido popularmente como Ozempic), porque actúa sobre el receptor GLP-1, presente en diferentes células implicadas en la regulación del apetito y del metabolismo en el cerebro y el tubo digestivo. No obstante, la estructura química es diferente, por esta razón, se puede tomar en formato de cápsula.

Marta Comas, nutricionista, y Juan José Cortés, paciente Vall d'Hebrón Barcelona

Un problema de salud pública

La obesidad es uno de los principales problemas de salud pública, afecta a más de 2.500 millones de personas en todo el mundo y causa diversas complicaciones como hipertensión, diabetes o enfermedades cardiovasculares. La llegada de tratamientos más accesibles y efectivos es, por tanto, clave para su abordaje.

“La posibilidad de disponer de un fármaco oral sin las limitaciones de otros tratamientos representa un avance importante para muchas personas con obesidad. Este estudio confirma que podemos ofrecer opciones más cómodas e igualmente seguras que pueden favorecer que más pacientes accedan al tratamiento y lo mantengan a largo plazo”, explica Ciudin.