Acto de apoyo a Marilou en su graduación en la UVic
Una víctima de bullying se venga de sus agresores en su graduación y señala a la UVic: "El acoso se premia con título"
Marilou Vioix convierte el evento en una protesta contra sus compañeros y la respuesta de la universidad a las palizas, insultos, amenazas y humillaciones
"Esto va por todas las personas que se han atrevido a hablar y por todas las víctimas de acoso y de agresiones físicas"
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Por todo lo alto. Así ha cerrado Marilou Vioix su durísima etapa en la Universitat de Vic (UVic), donde ha sido gravemente acosada por sus compañeros de la carrera de Fisioterapia, habiendo denunciado ante los Mossos d'Esquadra agresiones, amenazas y humillaciones. Tras cuatro años en la sombra, ha convertido el acto de graduación de su promoción en una festiva protesta contra sus agresores y la facultad.
El grupo de apoyo a la joven, organizado por la asociación No al Acoso Escolar (NACE), ha tomado los accesos al edificio con pancartas. Mensajes como "se titula a agresores" y "el acoso se premia con título" han opacado el evento, celebrado el lunes 16 de junio.
Ante 700 asistentes
La joven llegó al campus en limusina y con un ramo de flores, y lanzó la estola de graduada al recibir el diploma en el escenario, aclamada por los suyos. También escribió unas octavillas que pudieron leer los asistentes, unos 700 entre familiares y amigos de los graduados en su mayoría. En el documento, relataba cronológicamente su historia.
"29 de octubre de 2021. Sufro un traumatismo craneoencefálico con pérdida de conciencia, provocado por un estudiante de mi promoción a la salida de una fiesta. 10 de diciembre de 2021. Otro estudiante de mi promoción me da un puñetazo en la cara, también a la salida de una fiesta".
Prosigue: "Estas son algunas de las frases que se han dicho sobre mí: 'Es la puta más grande de Francia', 'si vemos a Marilou, le vamos a hacer lo peor', 'nos la vamos a follar encima de la palanca de cambios' o 'mira, aquí tienes su número, es gratis, llámala'.
"Marilou, has ganado tú"
Marilou también acusa a la UVic de pasividad --"dicen que no se puede hacer nada"-- y afea que sus agresores hoy "reciben su diploma con tal impunidad". También lamenta que la denuncia derivara en una mediación, "como si se tratara de una pelea entre niños". "Hemos ganado", recuerda que se congratularon en redes sociales sus acosadores tras alcanzar un acuerdo.
Una premisa a la que el grupo de apoyo a la estudiante le ha dado la vuelta con motivo de la graduación, que pone fin a "cuatro largos años de estudios en un entorno irrespirable": "Marilou, has ganado tú". "Esta lucha no es solo mía. Es por todas las personas que se han atrevido a hablar, que también sufrieron a este grupo, y por todas las víctimas de acoso y de agresiones físicas", ha celebrado la joven.
Sospechas de boicot a la protesta
La hora prevista para la llegada de los graduados era las 15:30 h, pero Marilou recibió la llamada de un profesor instándole a entrar al auditorio antes de las 15 bajo el aviso de que "se cerrarían las puertas".
NACE, la asociación que ha acompañado a la joven estos años, señala por ello un supuesto intento de boicot a la protesta por parte de la universidad. "Ella fue la única que recibió una llamada en ese sentido", sospecha su presidenta, Carmen Cabestany.
Un extremo que niegan fuentes de la universidad, que expresan su "sorpresa" ante tal afirmación. Las mismas voces aseguran a este medio asimismo que no ha detectado nuevos episodios de acoso desde que se interviniera en el caso.
Marilou posa con una pancarta contra el acoso que ha sufrido en la UVic: "Se titula a agresores"
En la residencia privada y en la universidad
El acoso que sufría Marilou --que se presentaba como Victoria a los medios, seudónimo del que ya se ha liberado-- la llevó incluso a irse a un hotel para huir de sus agresores, con los que convivía en la residencia de titularidad privada RUVIC, ubicada a menos de 10 minutos a pie y a algo más de medio kilómetro de la facultad.
En la residencia, tuvieron lugar las palizas; también una amenaza cuchillo en mano que motivó la actuación de los Mossos d'Esquadra.
Cambio de grupo y sobreseimiento
La ubicación fue precisamente el pretexto al que se remitió la universidad para asegurar que “todos los episodios de presunto acoso detectados se produjeron fuera de la universidad”. Algo que niegan Marilou y otros testigos. Por ejemplo, señalan intimidaciones en las clases y en los pasillos, así como la difusión de imágenes íntimas tomadas en el recinto universitario, durante una práctica en la que se debía participar en ropa interior por la naturaleza de los estudios.
El caso llegó a manos del juez en una vista que acabó con un acuerdo entre las partes por el que los investigados evitaban el juicio y la universidad debía cambiarlos de grupo para reducir los espacios que compartían con la joven. Esta, por su parte, censura que se la indujera al pacto para evitar mayores consecuencias para los acosadores. El caso quedó sobreseído, sin que Marilou dijera aún la última palabra; esta quedó dicha en la graduación.
