Densidad en las carreteras catalanas por la operación salida del primer fin de semana de verano anticipado y la celebración del Gran Premio de España de Fórmula 1 en el Circuito de Barcelona-Cataluña, tradicionalmente conocido como Montmeló. Tanto es así que la AP-7, la principal autopista catalana, acumula 20 kilómetros de retenciones a mediodía de este sábado, 31 de mayo.
Los atascos se prolongan durante 12 km en sentido norte, dirección Girona, entre la Roca del Vallès y Santa Perpètua de Mogoda. También 8 km hacia Tarragona en el tramo comprendido entre Castellví de Rosanes y Castellbisbal; en este caso, por un accidente.
El Servei Català de Trànsit (SCT) recomienda a los vehículos que se desplacen hacia o desde el norte de la comunidad que lo hagan mediante la C-32 norte, por el Maresme (Barcelona); también piden evitar circular por la AP-7 en las horas de más afluencia y aprovechar las horas valle.
Tráfico durante una operación salida en la AP-7, en Sant Cugat del Vallès, Barcelona
Medio millón de salidas
El fin de semana marcado por el GP de Fórmula 1 ha obligado a hacer cambios en la movilidad. Además, las altas temperaturas anticipan el verano en Cataluña y empujan a los barceloneses a coger el coche e ir a la playa, con termómetros por encima de los 30 en toda la comunidad.
Se prevé la salida de unos 490.000 vehículos del área metropolitana de Barcelona el sábado y unos 300.000 vehículos de vuelta el domingo.
Dispositivo especial por el GP de España
A partir de las 19 horas del sábado, se instalará un carril adicional en el tramo norte entre Llinars y Montornès del Vallès (Barcelona) en sentido sur, una vez finalizado el Gran Premio. También habilitarán un carril adicional en el tramo sur de la AP-7 entre Vilafranca y Papiol (Barcelona) en sentido norte y también en la C-32 Norte entre Llavaneres y Montgat (Barcelona) en sentido sur para favorecer el uso de la autopista como alternativa a la AP-7 durante la vuelta.
Este domingo se desplegarán por primera vez medidas de retorno a la C-65/C-31 en Santa Cristina d'Aro (Girona), para disuadir a los usuarios de atajar por el interior del municipio; en este sentido, se cortará el acceso a la C-65 desde la C-230z a su paso por la localidad y se obligará a los vehículos a hacer un cambio de sentido para reincorporarse a la autovía C-31 y posteriormente a la C-65.
