En el mundo de los fraudes, no existe un perfil homogéneo de víctima, ya que cualquiera puede caer en las redes invisibles que se ocultan tras la pantalla.
Es el caso de un arquitecto barcelonés que, confiado en una inversión aparentemente prometedora, se vio atrapado en una compleja estafa de criptomonedas que lo dejó con una pérdida de más de 159.150 euros.
La víctima, que ha preferido mantenerse en el anonimato, cayó en una sofisticada estafa conocida como 'pig butchering'. Una modalidad que se basa en atraer de manera gradual a la víctima para realizar inversiones crecientes a una operación aparentemente sólida, pero que termina siendo un fraude.
El cebo: inversiones muy rentables
El embrollo comenzó en junio de 2024, cuando el arquitecto fue contactado a través de Telegram por la plataforma ZodiacSpeck. Le invitaban a que se registrara en su plataforma Webtrader y comenzar a invertir en activos financieros.
Un tal Alberto Simon Delpino Álvarez, quien se presentó como su guía, se convirtió en su principal contacto. Y así fue como lo que inicialmente parecía una oportunidad de inversión se transformó rápidamente en una pesadilla.
Imagen de la web de ZodiacSpeck
A través de la herramienta Anydesk, utilizada para conexiones remotas, Delpino le ayudó a instalar el software necesario en el ordenador de la víctima.
Entre junio y agosto, el arquitecto realizó varias transferencias que ascendieron a un monto total de 53.005 euros, que fueron depositados en dos cuentas bancarias creadas a su nombre, sin su conocimiento ni consentimiento.
A pesar de las dudas iniciales, el arquitecto confió en su supuesto mentor y en la aparente solidez de la plataforma.
Empiezan los problemas
El problema comenzó cuando el arquitecto trató de recuperar los beneficios que, según su aplicación ZodiacSpeck, había generado a través de sus inversiones.
La plataforma le mostraba ganancias por un valor de 200.145 dólares. Así, aconsejado por Delpino, el arquitecto descargó una billetera de criptomonedas mediante la aplicación Blockchain.
Criptomoneda Ethereum
El supuesto guía volvió a utilizar Anydesk para conectarse remotamente al ordenador de la víctima e instalar el nuevo software para las transacciones. Pero, a partir de ahí, los gestores de las criptomonedas le exigieron que realizara más pagos para acceder a sus supuestos beneficios.
El arquitecto hizo una serie de nuevas transferencias por valor de 106.150 euros, pero los pagos seguían siendo solicitados, lo que lo dejó desconcertado.
Un informe pericial
Fue entonces cuando decidió buscar ayuda y contactó con un despacho de abogados. Como parte de su asesoramiento, contrataron a un perito informático, Sergio C., quien logró determinar, mediante un informe pericial, que había sido estafado bajo el esquema 'pig butchering'.
El informe reveló que la plataforma ZodiacSpeck era completamente fraudulenta, y que las ganancias mostradas en la aplicación eran falsas. En lugar de invertir el dinero como se había prometido, los estafadores fragmentaron los fondos y los distribuyeron a diversas billeteras de criptomonedas.
Imagen de una billetera de criptomonedas en la aplicación Binance
El perito pudo rastrear los fondos y encontró que la mayor parte de los mismos se había transferido a billeteras asociadas con la plataforma Binance.
Una herramienta, que según consta en la denuncia, está obligada por el Banco de España (y la normativa de prevención del blanqueo de capitales) a realizar la verificación de identidad de sus clientes. "Por lo que saben perfectamente quiénes están detrás de todas las carteras de criptomonedas", se extrae del texto.
La presión continúa
A pesar de haber sido estafado, el arquitecto continuó recibiendo llamadas de los mismos delincuentes, así como de supuestas empresas que se ofrecían a recuperar su dinero, otra táctica comúnmente utilizada para hundir aún más a las víctimas.
De hecho, los Mossos d'Esquadra han identificado este tipo de estafas como 'estafas sentimentales', pues generan un grave perjuicio económico y psicológico para las víctimas.
Una web no autorizada
Asimismo, las posteriores indagaciones del arquitecto permitieron averiguar que ZodiacSpeck no aparece como entidad habilitada en la web de FCA (Financial Conduct Authority), la autoridad supervisora de los mercados del Reino Unido, que es desde donde le decían que operaban.
Es más, en octubre de 2024, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) emitió un comunicado para hacer público que esta plataforma no es una entidad autorizada para prestar servicios de inversión.
Nota de la CNMV a 7 de octubre de 2024
Por todo ello, en su denuncia, que ha redactado minuciosamente el abogado especializado Ricardo Oliva, del bufete Algoritmo Legal, la víctima llega a la conclusión de que ha sido víctima de un engaño delictivo, pues, entre otras conductas: las revalorizaciones que veía en la aplicación de ZodiacSpeck no eran reales; se crearon cuentas bancarias a su nombre sin que él tuviera acceso ni control; o, la aplicación Blockchain también resultó ser un fraude, que tenía como único propósito que desembolsara más dinero.
Una investigación compleja
Con el caso en manos de los Mossos d'Esquadra, las autoridades están investigando los hechos, pero las dificultades legales y la posibilidad de que los estafadores operen desde fuera del país complican la resolución del caso.
Sin embargo, el informe del perito ha dejado claro que el arquitecto fue víctima de una estafa organizada, que utiliza la confianza de sus víctimas para robarles grandes sumas de dinero a través de plataformas aparentemente legítimas.