
Imagen del juicio contra M. T. B.
Los Mossos intentaron frenar al kamikaze que provocó un accidente mortal en Gurb
A pesar de los medios sonoros y lumínicos que emplearon para advertirle de su conducción errónea, M.T.B. prosiguió circulando a contra dirección durante 12 kilómetros
Si quieres sabes más: El kamikaze que mató a una menor en Gurb se enfrenta a 13 años de prisión
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Ni la presencia policial disuadió a M. T. B., el kamikaze, de 47 años, que provocó un terrible accidente mortal la madrugada del 4 de marzo de 2018 en la carretera C-17 a su paso por Gurb (Barcelona).
Y es que pese a los medios sonoros y lumínicos que emplearon las patrullas de los Mossos d'Esquadra para advertirle de su errónea conducción, M.T.B. hizo caso omiso y prosiguió circulando a contra dirección durante 12 kilómetros.
Así lo has manifestado los agentes que han declarado este martes ante el tribunal de jurado de la Audiencia de Barcelona, asegurando que llegaron a atravesar la carretera para frenar al conductor ebrio. Sin embargo, sus esfuerzos fueron en vano: "iba a toda velocidad, como un kamikaze", ha recordado uno de ellos.

EUROPA PRESS
Como consecuencia del grave comportamiento del conductor, Meritxell, una joven de 17 años, falleció en el acto. La menor iba en el coche de su padre con una prima y una amiga de ambas. Volvían de una fiesta cuando se cruzaron a M. T. B. circulando a contra dirección, ebrio, drogado y a 145 km/h.
Caso omiso a las indicaciones policiales
En su declaración como testigo, la mossa d'esquadra ha explicado que alrededor de las 6:50 horas de la mañana recibieron el aviso de que un vehículo circulaba de forma temeraria por la carretera C-17.
Por ello, las patrullas se desplazaron hasta el punto donde se le había ubicado y empezaron a perseguirle. Activaron las señales acústicas y luminosas del coche policial y se colocaron en la calzada "de forma oblicua, haciendo pantalla" para obligarle a parar.
No obstante, ha relatado, el coche siguió su marcha "a mucha velocidad", sin cambiar su trayectoria, por lo que su compañero, que estaba al volante, tuvo que cambiar el vehículo policial de sentido porque el conductor se dirigía hacia ellos "como un kamikaze".
Pocos metros después, provocó la colisión mortal.

Imagen de archivo de la C-17
Hablan los hijos de él
En la misma sesión, también han declarado los dos hijos del acusado. Ambos han explicado que dos años antes del accidente, en 2016, falleció su madre y que el padre fue quien se hizo cargo de ellos. Justo en esa época, explican, empezó a rehacer su vida y no creen que tuviera intenciones de suicidarse.
Además, han remarcado que no solía beber alcohol ni salir de fiesta más allá del día del siniestro mortal... Y es que en las pruebas de alcoholemia, M.T.B. dio un resultado positivo con una tasa de 0,62 mg/l (más del doble del límite permitido). Es más, las pruebas forenses revelaron que, al incorporarse a la carretera, su tasa de alcohol en sangre era de 1,345 gramos/litro. También dio positivo por cocaína.
Petición de 13 años de prisión
Por todo ello, el fiscal Félix Martín solicita para este kamikaze una pena de 13 años de prisión, además de una indemnización de casi 350.000 euros que se distribuirán entre los padres y las hermanas de la menor fallecida, así como las dos amigas de la víctima que viajaban en el vehículo y resultaron heridas en el siniestro.
Según el escrito de calificación al que ha tenido acceso Crónica Global, los hechos de los que se le acusa constituyen una serie de delitos, entre ellos conducción con manifiesto desprecio por la vida de los demás, conducción bajo los efectos del alcohol, homicidio imprudente y lesiones por imprudencia.