
Asesinato a plena luz del dia en una cafeteria de Montgat
La 'vendetta' final: un 'narco' de El Prat pagó 200.000 euros para matar a 'Bubito', el estibador ejecutado en Montgat
'Lucky', detenido por la Guardia Civil, contrató a unos sicarios albaneses y ordenó la muerte de David Caballero desde prisión
En relación: La Guardia Civil da un golpe maestro contra el grupo que entró toneladas de cocaína por el Puerto de Barcelona
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A pesar de recibir amenazas de muerte desde el otro lado del Atlántico, David Caballero, alias Bubito, --el hombre ejecutado el 15 de noviembre en Montgat (Barcelona)--, también tenía enemigos mucho más cerca de casa.
Según informaciones recientes, la histórica lucha por el control del puerto de Barcelona se había convertido en una guerra de vendettas entre clanes rivales. Hasta el extremo de que un narco afincado en El Prat de Llobregat pagó 200.000 euros a unos sicarios albanokosovares para borrar del mapa a Bubito.
Así lo demuestran las llamadas telefónicas intervenidas en una operación policial contra la organización liderada por Lucky, el hombre que, desde prisión, ordenó la muerte de su principal enemigo. Ambos se dedicaban a la introducción de grandes toneladas de cocaína a través del puerto. Y, al parecer, ninguno de los dos capos tenía suficiente con tu trozo del pastel.
De aliados a enemigos
Las conversaciones intervenidas al capo de El Prat, Lucky, y que han sido adelantadas este miércoles por La Vanguardia, revelan cómo este narco contrató a un grupo de sicarios para acabar con la vida de Bubito. Según se desprende de los diálogos, el primero señalaba al segundo de ser el culpable de perder varios cargamentos de droga.
Y es que, al parecer, en un inicio, ambos, Lucky y Bubito, formaron una alianza para introducir la droga por el puerto de Barcelona. Caballero, que era estibador de profesión, conocía cada rincón de aquella infraestructura; y Lucky tenía los contactos. Sin embargo, el poder que ambos fueron adquiriendo hizo que la relación se rompiera. Pasando de aliados a rivales.

Contenedores de mercancías en el muelle de descarga del Puerto de Barcelona
Asesinato exprés
Según los informes policiales que ha consultado La Vanguardia, el crimen se empezó a gestar en octubre pasado. En ese momento, Lucky ya estaba entre rejas. Sin embargo, su situación no le impidió orquestar el crimen de Caballero.
La Guardia Civil intervino a principios de noviembre otra conversación en la que el entorno de Lucky ordenaba la ejecución. Y fue dicho y hecho.
Días después, el viernes 15 de noviembre, un sicario se personó en el colegio donde iban los hijos de Caballero y, sin mediar palabra, le disparó dos tiros por la espalda cuando la víctima se encontraba tomando café junto con otros padres de la escuela.
El golpe contra la red de 'Lucky'
La investigación de la Guardia Civil no solo ha permitido resolver el crimen de Bubito, sino que ha hecho posible desmantelar una de las redes del narcotráfico más activas y peligrosas de nuestro país.
De hecho, la investigación comenzó el 4 de enero de 2022, cuando se interceptaron en Lleida 620 kg de cocaína ocultos en el rotor de un generador eléctrico importado por una empresa panameña.
Este hallazgo permitió a la Guardia Civil establecer alertas y sistemas de seguimiento en relación con los envíos vinculados a esa empresa. Gracias a la colaboración de autoridades internacionales, se descubrieron más remesas ilegales.
Sin embargo, no fue hasta agosto de 2024 cuando se pudo detener al capo.
Más de 40 armas de guerra
A partir de la detención de Lucky, los investigadores han dividido el caso en varias fases, siendo la tercera y última de ellas la más compleja. En un primer momento, el 10 de diciembre de 2024: los agentes realizaron 17 registros en las provincias de Barcelona, Valencia y Málaga. Dando como resultado la detención de 10 personas y la incautación de más de 6 millones de euros en efectivo.
También localizaron drogas y armas de fuego, incluida una AK-47, así como vehículos de altísima gama y documentación clave sobre la red de blanqueo.

Dinero en efectivo recuperado por la Guardia Civil durante el operativo
Días después, el 17 de diciembre, se repitió la ofensiva con cinco registros más, incautando otros vehículos de lujo (como un Lamborghini Aventador y un Porche Macan S). Por último, el 14 de enero de 2025, durante el último dispositivo, los agentes intervinieron más de 40 armas de fuego.
En la actualidad, 22 de los 25 detenidos siguen en prisión preventiva.