Barcelona es la capital de la fiesta. Y no sólo a nivel catalán. Cada año millones de turistas se acercan a la ciudad para disfrutar de la ciudad y su noche, siempre tan viva. Pero ahora, una de sus fiestas más icónicas se despide.
Dirty Disco, más conocido por muchos como ‘la Dirty’ (no confundir con ‘el Dirty’ de Razzmatazz), se despide este 7 de febrero de City Hall, dejando huérfanos a muchos de sus asistentes habituales.
Adiós a 8 años de baile
Lo han anunciado sin previo aviso. Tras la pasada fiesta del 31 de enero, los organizadores del evento comunicaban en sus perfiles de redes sociales que llegaba su “último baile”.
“Después de 8 años bailando contigo semana tras semana, el 7 de febrero será nuestra última fiesta en City Hall”, señala su comunicado.
Los reyes del techno
Su despedida ha sido un jarro de agua fría para sus habituales que, religiosamente, acudían los viernes a esta sala situada en la Rambla Cataluña de Barcelona en busca de techno y diversión.
La fiesta tenía esta seña de identidad. Música electrónica y ambiente mayoritariamente LGTBIQ+ que, desaparecidas las salas de Arena del centro de la ciudad, encontraron allí un nuevo espacio para pasarlo bien.