Lío mayúsculo por el nuevo gran hospital que la CUP forzó en una zona parcialmente inundable de Girona. El sindicato CC.OO, mayoritario en la sanidad catalana, ha exigido "nuevos estudios" para el nuevo Josep Trueta de Girona. Por su parte, Comuns ha llevado el asunto al Parlament.
Ha abierto el fuego Comisiones, que esta semana ha pedido "que se encarguen nuevos estudios" sobre el proyecto del nuevo Trueta en Girona para verificar la "inundabilidad" de los terrenos. Estos trabajos, ha subrayado el sindicato de referencia en el ICS y Siscat, deben contar con "la participación de los agentes sociales".
La DANA de Valencia, detonante
La agrupación que lidera María Àngels Rodríguez recuerda que los trágicos hechos de Valencia han sido un detonante, aunque CC.OO ya advirtió "siempre" de que parte de los terrenos del nuevo macrohospital entre Girona y Salt "eran inundables".
En clave de propuestas, Comisiones aboga por dos hospitales distintos en la provincia, con dos puertas de urgencias diferenciadas. Es una solución, apuntan, que garantiza la "equidad territorial".
Los Comunes preguntan al Govern
La pifia también ha movilizado a Comuns, que han entrado preguntas al Parlament. David Cid, portavoz de la confluencia en la cámara catalana, preguntará al Govern si esa inundabilidad parcial "es un riesgo para el proyecto".
Cid también quiere saber si el Ejecutivo "encargará nuevos estudios" sobre la anegabilidad del futuro hospital provincial tras los trágicos hechos de la Comunidad Valenciana.
En este sentido, la fuerza quiere saber si Campus Salut --así se llamará la nueva ciudad asistencial-- entrará en la lista de proyectos en zonas inundables en revisión que anunció el president Salvador Illa.
La CUP lo exigió y aprobó el planeamiento
Cabe recordar que el nuevo campus médico de Girona, aún en fase de diseño, ha aterrizado en la polémica al situarse, parcialmente --lo estará, por ejemplo, el edificio de Consultas Externas-- en zona inundable por crecida de ríos.
Esta localización, junto al actual IAS de Girona, hospital satélite, fue una exigencia de la CUP, que gobierna la capital provincial, y del Colegio de Médicos de Girona. CC.OO se opuso, y el PSC, ganador de las municipales en la urbe en 2023, también mostró reparos en la localización.
Pero finalmente, prevaleció el criterio político de los anticapitalistas y el nuevo Trueta se empezó a tramitar en su controvertido enclave actual.