Los Mossos d’Esquadra han efectuado varias entradas y registros en tres provincias catalanas contra una organización criminal especializada en el tráfico de hachís después de un desembarco frustrado en el Masnou el pasado viernes. El dispositivo se ha saldado con 30 detenciones.
Según ha podido saber Crónica Global de fuentes policiales, el “epicentro” del operativo se ha desarrollado en Manlleu, donde se han realizado seis entradas, pero también se han efectuado registros en Torelló (Barcelona), Sant Hipòlit de Voltregà (Barcelona), Roses (Girona) y Ponent (Lleida).
En el operativo han participado 200 efectivos de la División de Investigación Criminal (DIC), de la Brigada Móvil (Brimo), del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), del Grupo Especial de Intervención (GEI), la policía aérea, la Unidad Canina y Seguridad Ciudadana de Mossos d’Esquadra, así como el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria. La investigación está bajo secreto de actuaciones.
Un desembarco frustrado
El dispositivo de este martes estaría relacionado con un desembarco frustrado durante la madrugada del pasado viernes en el municipio de Arenys de Mar.
Una embarcación del Servicio de Vigilancia Aduanera estaba patrullando en el mar cuando vio cómo se acercaban dos narcolanchas a la costa en la zona, por lo que avisaron a los Mossos para que actuasen desde tierra.