Los Mossos d’Esquadra investigan a cinco sepultureros del Cementerio de Montjuïc de Barcelona acusados de profanar y robar en al menos 162 tumbas del camposanto durante el verano de 2023, como destapó Crónica Global.
Casi un año después de que saliera a la luz un suceso que ha generado polémica, varias fuentes conocedoras del caso indican que la empresa municipal que gestiona el equipamiento funerario, Cementiris de Barcelona (CBSA), se ha querellado contra cinco de sus propios sepultureros después de que uno de ellos intentara vender varios kilos de joyas en un comercio de la marca Compro Oro cercano a su domicilio.
Entre estas piezas había anillos y pendientes de difuntos, pero también una gran cantidad de dientes de oro, un hecho que llamó la atención del responsable del establecimiento.
A raíz de estos hechos, según ha podido conocer este medio, se efectuó un registro policial en el domicilio del trabajador que ha sido clave en el desarrollo del caso.
Citados a declarar el 24 de mayo
Los cinco acusados (investigados, en lenguaje jurídico, pues se les tomará declaración el 24 de mayo como sospechosos) son todos sepultureros del Cementerio de Montjuïc. Se trata de una mujer que ocupa el puesto de auxiliar, unos hermanos gemelos y el hombre que intentó colocar las piezas en una tienda dedicada a comprar oro, señalan los mismos interlocutores.
[Saqueadores de tumbas en el Cementerio de Montjuïc]
También figura como investigado otro empleado que hace meses dio la voz de alarma a través de un correo electrónico. Alertó de que había detectado huecos en algunos de los nichos que dejaban al descubierto los ataúdes. Pese a que no obtuvo respuesta hasta pasados seis meses, los responsables del camposanto lo han incluido ahora en la lista de querellados que tendrán que declarar ante el juez el próximo 24 de mayo.
Tren de vida alto
No es la primera vez que la sombra de la sospecha sobrevuela a estos trabajadores.
En concreto, la mujer investigada comenzó en el pasado a presumir de lujos y de un tren de vida elevado que no podía costear con el sueldo de auxiliar de cementerio. Entre otros, empezó a acudir al trabajo con un coche "despampanante", indican fuentes policiales.
Cementiris: "Colaboración con la policía"
A preguntas de este medio, una portavoz de Cementiris de Barcelona se ha limitado a responder que "se interpuso denuncia en verano de 2023 tras las aperturas ilícitas de algunos nichos en el Cementerio de Montjuïc".
A raíz de ello, "hemos estado en contacto permanente y con plena colaboración con la autoridad judicial y los Mossos d'Esquadra, y así seguirá siendo".
Los Mossos desplegaron drones con detectores de calor
La oleada de profanaciones en el mayor camposanto de la capital catalana, de 56 hectáreas, obligó a los Mossos d’Esquadra a desplegar la unidad de drones con detectores de calor el pasado verano con el objetivo de localizar a los autores de estos hechos in fraganti.
Pese a que la policía catalana peinó durante varias noches el cementerio, no localizaron a los ladrones, lo que hizo pensar que podrían ser los propios sepultureros los que habrían forzado las tumbas durante su jornada laboral para sustraer los objetos personales de los cadáveres.
Además, los nichos afectados eran, en su mayoría, de la década de los años 60 y 70 . Es decir, sepulturas poco frecuentadas por las familias de los finados, un hecho que los trabajadores conocían y que habrían aprovechado a su favor.
Un cese: el director de Operaciones
Todas las piezas encajan y apuntan a una banda interna que se organizó en el mismo Cementerio de Montjuïc. Con todo, los hechos deberán probarse en sede judicial.
Cementiris de Barcelona ha tomado cartas en el asunto de forma paralela. Prejubiló al director de Operaciones, Joan Manuel Aparicio, que era el máximo responsable de la crisis por sus responsabilidades. Ahora, las desempeña el director jurídico de la empresa pública, Esteve Grima.