Terrassa (Barcelona) ha rendido homenaje a las tres víctimas catalanas del atentado terrorista sucedido en Afganistán. Lo ha hecho con un minuto de silencio a las 12 horas de este domingo 19 de mayo, con familiares, representantes del Ayuntamiento, vecinos y entidades ante el edificio consistorial.
Los tres asesinados eran catalanes y, una de ellas, Elena S.V., de 31 años, vivía en la cocapital del Vallès. De hecho, regentaba una farmacia en el barrio de Les Arenes y era hija de otra de las fallecidas. Sus cuerpos siguen pendientes de repatriación.
Minuto de silencio cargado de emoción
Tras guardar un minuto de silencio y una vez depositadas las flores en recuerdo a las víctimas, el alcalde, Jordi Ballart, ha lamentado los hechos y ha expresado la "consternación" que estos han provocado en la ciudad. De la farmacéutica ha dicho que tenía un "vínculo muy especial" con la ciudad y que era una persona "solidaria", "muy querida" y una "referente".
El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart (c) da el pésame a un familiar de Elena, la vecina asesinada en Afganistán
"Elena estaba muy vinculada a la ciudad, era una referente y una persona muy querida en el barrio, por lo que estamos muy afectados", ha descrito el primer edil, que ha informado de que el consistorio ha puesto sus servicios a disposición de la familia "en un momento difícil y ante una muerte completamente injustificada".
Asimismo, se ha puesto en contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores para que se "aceleren al máximo" todos los trámites para la repatriación de los cadáveres, pese a que ha reconocido que son "complicados". También ha instado a los organismos internacionales y a la Audiencia Nacional, que ya ha abierto una investigación, a esclarecer los hechos y sus culpables, supuestamente miembros de Estado Islámico, para que "paguen por este crimen".
Elena y Susana, farmacéuticas asesinadas en Afganistán
Elena S. era hija de Susana V., también farmacéutica; esta tenía su local en la estación de Sants de Barcelona e inoculó el gusto por las probetas y los medicamentos a sus tres hijas, que regentaban el establecimiento en Terrassa desde hace una década.
El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart (c), durante el minuto de silencio convocado este domingo por el Ayuntamiento de Terrassa en recuerdo de la farmacéutica de esa población asesinada en Afganistán
Madre e hija viajaron a Afganistán el pasado miércoles día 15 para pasar unos días de vacaciones, y este viernes, dos días después de llegar, fueron asesinadas en un atentado en Bamiyán, en el centro del país. Hacia las 18:00 hora local (14:30 en España), cuando el grupo se encontraba dentro de un vehículo mientras visitaba la ciudad de Bamiyán, fue atacado en el bazar de la ciudad "por hombres armados desconocidos", según el director de Información y Cultura de Bamiyán, Safiullah Rayed.
El tercer catalán fallecido, un ingeniero jubilado
El tercer catalán fallecido es R.B.R., de 63 años y natural de Girona. Era un ingeniero jubilado que había trabajado en la empresa química Covestro, en su planta de Tarragona; fue responsable de calidad de Seguridad y Medio Ambiente en la citada empresa.
[Abandona Afganistán uno de los turistas españoles ilesos en el ataque de Bamiyán]
Pendientes de repatriación
Diplomáticos españoles continúan este domingo su trabajo para conseguir la pronta repatriación desde Afganistán de los cuerpos de las tres víctimas catalanas, así como la mujer española que resultó herida grave en el atentado, que permanece ingresada en un hospital en Kabul, y los dos turistas españoles que resultaron ilesos en el ataque.
Hay siete detenidos por el ataque. En España, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ya investiga por un presunto delito de terrorismo el asesinato de los tres españoles.