El juzgado número 5 de Tarragona ha imputado a la condenada por el crimen de la Guardia Urbana, Rosa Peral, y a su padre, Francisco Peral, por ocultación de bienes al transferirle la casa y el coche a su padre pocos días antes de que fuera condenada por el asesinato de su pareja.
El juzgado apunta a que la acusada habría donado sus bienes a su progenitor para ahorrarse la indemnización que tenía que pagar a la familia de la víctima. Tanto Rosa Peral como Albert López, el otro autor del crimen, fueron condenados a pagar de forma conjunta 885.000 euros a los familiares de Pedro Rodríguez. En caso de no tener dinero, les embargarían las propiedades.
Se libró de la indemnización
Según avanza La Vanguardia, pocos días antes de la condena, Peral citó a un notario y transfirió la casa y el coche a su padre. De este modo, pasó a ser insolvente y se liberó de la indemnización. Todo ello lo denunció la familia de la víctima en una querella que ahora la jueza ha aceptado.
"Existe una coincidencia casi exacta de la fecha de la donación de la mitad indivisa del inmueble por parte de la querellada con la prevista para la resolución del recurso de casación y la inminente firmeza de la sentencia", apunta la querella.
Hasta cuatro años de cárcel
El delito se castiga con hasta cuatro años de prisión. La juez los ha citado a declarar el 24 de enero a las 11.00 horas. En caso de una hipotética condena, se añadiría a los 25 años que Peral se encuentra cumpliendo en la cárcel por el asesinato de Pedro Rodríguez.
Albert López, en cambio, sí puso a disposición del juzgado el piso del que era propietario en Barcelona y será subastado en los próximos meses.