Marta O. J., una enfermera catalana natural de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), falleció el martes en Bali tras sufrir un accidente en una expedición de buceo. A falta de los resultados de la autopsia, fue la rotura de un vaso sanguíneo lo que le provocó la muerte. Tenía 57 años.
La tragedia tuvo lugar el martes, según el informe policial divulgado por la Policía de la regencia de Karangasem. Siempre según la versión oficial, Marta participó en una doble inmersión de submarinismo en la turística playa de Tulamben. La primera fue bien; la segunda desencadenó en su muerte.
Dificultades para respirar
La enfermera, que estaba disfrutando de unos días de turismo con su marido, completó la primera inmersión con éxito y "en buen estado de salud". Esa primera zambullida comenzó a las 11.30 hora local (GMT+8) y duró 48 minutos. La segunda la inició a las 13.45 y se prolongó 52 minutos.
Sin embargo, tras salir a la superficie por segunda vez, Marta se quejó de falta de aire, por lo que de inmediato fue trasladada a un centro de salud comunitario, donde fue atendida. Murió a las 16.20 "debido a la rotura de un vaso sanguíneo", según el informe policial, a la espera de los resultados de la autopsia.
Grallera
El Hospital Esperit Sant de Santa Coloma, donde Marta trabajaba como enfermera en el bloque quirúrgico, guardó un emotivo minuto de silencio en su memoria.
Asimismo, la víctima era una gran aficionada a la gralla y pertenecía a la familia de los Grallers de Santa Coloma. El colectivo musical también se ha despedido de ella con un emotivo mensaje, en el que destaca su "espíritu lleno de pasión por la música, la cultura y las personas".