Este martes han declarado en la Audiencia Provincial de Barcelona Dolores y Pilar Vázquez, las hermanas gemelas acusadas de acabar con la vida de Pedro, pareja sentimental de la primera, junto con Isaac G., novio de la segunda. De hecho, fue este último, cuñado de la víctima, quien la golpeó hasta la muerte con una pata de cabra en el rellano, ante el horror de los vecinos, que presenciaron los hechos a través de la mirilla. Durante la segunda jornada del juicio oral, las dos acusadas han negado ante el tribunal que urdieran un plan para asesinarlo y que participaran activamente en los hechos.
Dolores, la que era novia de Pedro, ha descrito que la relación que mantenían era “buena” y que, aunque a veces tenían discusiones de pareja, “siempre se solucionaban”. “Nos queríamos por encima de todo”, ha expresado la acusada, si bien ha añadido que su familia no quería que saliera con el fallecido porque “era violento” y, según ella, la había agredido “física y verbalmente”.
Una descripción opuesta a la que ha hecho la exmujer de Pedro que, en calidad de testigo, lo ha descrito como "una persona tranquila, no agresiva y muy normal", pese a que era campeón de España y Europa de taekwondo. "Jamás mostró violencia conmigo, cuando discutíamos se iba, me dejaba gritando sola, no le gustaban los conflictos", ha reiterado la exesposa del fallecido. Tampoco el médico de cabecera de Dolores, que también ha declarado como testigo, apreció nunca lesiones compatibles por malos tratos durante las consultas.
"A las 2.00 ahí"
La madrugada de los hechos, el 10 de agosto de 2021, ha recordado Dolores, después de cortarle y teñirle el pelo a Pedro en la casa de él, ella quedó con su familia. Como la relación de él con sus allegados era nefasta, Pedro y ella quedaron en volver a verse para dormir juntos en casa de ella, el mismo domicilio en el que vivía habitualmente Isaac, el novio de su hermana Pilar, a quien le había alquilado una habitación hacía escasos dos meses. Sin embargo, la acusada sostiene que no sabía que esa madrugada su hermana e Isaac se presentarían en su casa, pues los fines de semana solían quedarse a dormir en la casa de Pilar, momento en el que ella aprovechaba para convivir con el malogrado en su domicilio.
Así lo ha explicado frente al tribunal, pese a que ha reconocido que esa noche recibió un mensaje de Whatsapp de Isaac en el que este le decía “A las 2.00 ahí”. “No entendí el mensaje, pero se lo enseñé a Pedro y él se puso alterado, me dijo que pasaría la noche conmigo y que por la mañana temprano se iría a su casa”, ha recordado. “Si llego a saber que vendrían Isaac y mi hermana, Pedro no estaría allí”, ha asegurado con vehemencia. Cuando sus familiares llegaron, tanto ella como Pedro escucharon la puerta y él “se alteró, se puso nervioso y quería salir de la habitación”.
"Le ayudé a limpiar porque estaba en shock"
Dolores ha narrado que intentó agarrarlo por la espalda para impedir que saliera y evitar así un encontronazo con Isaac, pero Pedro la acorraló contra la cama, lo que provocó que un vaso se cayera al suelo y estallara en mil pedazos. El sonido de los cristales rotos motivó que “a los pocos segundos entrara Isaac por la puerta con un palo”, ha expresado. Ella, sostiene, se quedó en el interior de la habitación “temblando, rezando y muy asustada”. Pasado un rato regresó su cuñado Isaac y arrancó la sábana que estaba puesta en la cama y en la que hasta hacía un rato dormían Pedro y ella. “Mi cuñado me pidió que le ayudara a fregar el rellano y le ayudé a limpiar”, porque, asegura, “estaba en shock”. Fue precisamente este estado de pánico lo que, según ella, le impidió avisar a la policía.
En la misma línea, su hermana Pilar, pareja del autor material del crimen, ha negado su participación en estos hechos y ha asegurado que no podía haber previsto ni evitado la comisión del asesinato de su cuñado Pedro. Niega que planeara el crimen, como sostiene la fiscalía, a pesar de que sí ha reconocido que sabía que su hermana tenía problemas con su pareja, porque se lo había expresado “por mensaje, por llamadas telefónicas y también personalmente”.
El autor alega legítima defensa
Por su parte, Isaac G., pareja de Pilar y autor material del crimen, ha declarado que la noche de autos, cuando llegó con su novia a casa, Dolores y Pedro estaban discutiendo. “Escuché unos cristales romperse, así que entré en mi habitación y cogí una barra metálica”, ha reconocido. La barra, ha argumentado, la tenía en su cuarto porque el barrio era inseguro y ya le habían forzado una vez el paño de la puerta.
Blandiendo la barra metálica, Isaac se dirigió a la habitación para proteger a su cuñada y, según él, Pedro intentó atacarlo. “Se dirigió hacia mí para atacarme con los brazos en alto y, a la que pude zafarme del puñetazo que me lanzó, le golpeé en la cabeza”, ha reconocido. Isaac G. sostiene que, tras golpearlo por primera vez, Pedro huyó y él se dirigió hacia su cuñada Dolores. Tras comprobar que esta se encontraba bien, salió escaleras abajo y siguió golpeando a Pedro hasta la muerte. “Fue entonces cuando acabé con su vida”, ha reconocido.
Por estos hechos, la fiscalía pide para Dolores 24 años y medio de prisión y 24 para su hermana, Pilar, y para el novio de esta y presunto autor material de los hechos, Isaac G. G.