Caza al chivato en la fiestas Pont Aeri. El entorno de la promotora Midnight Barcelona, la empresa que organiza las polémicas fiestas revival en la discoteca Revel de Castellar del Vallès (Barcelona) persigue a la fuente que ha filtrado las molestias que provocan las juergas de música máquina.
Lo explican voces del sector del ocio nocturno, que detallan que la promotora de Banyoles (Girona) ha iniciado una operación discreta para hallar la fuga de información que ha abierto el debate sobre los efectos colaterales de las sesiones, incluido el peinado de grupos de WhatsApp y presiones a extrabajadores.
El ayuntamiento interviene
En paralelo, el Ayuntamiento de Castellar ha intercedido en el pulso. Busca encauzar las molestias que provoca la sesión mensual en la Revel, y que incluye música a todo volumen, consumo de alcohol y droga en la calle y daños en la infraestructura cercana del Polígono Industrial Can Carner.
Este medio ha preguntado al equipo de gobierno de Ignasi Giménez (PSC), sin recibir respuesta.
Otro 'Duro Festival' en octubre
La controversia sobre las fiestas Pont Aeri discurre en paralelo al debate abierto sobre otro producto de Midnight: los encuentros hard tech junto al Circuito de Montmeló (Barcelona).
La promotora ha organizado otro, el Bass in the Park, de cara al sábado 7 de octubre. Sigue la estela del problemático Duro Festival, que terminó con quejas de vecinos y, fuera del recinto, con el fallecimiento de cuatro personas atropelladas por un tren cuando acudían al evento. No hubo minuto de silencio.
Midnight: los 'reyes de la máquina'
Lo que subyace son las consecuencias colaterales de algunos productos de Midnight. La productora la administra Salvador Avellana, con intereses en los sectores de ocio nocturno, construcción y, en efecto, la noche catalana.
Dirige lo proyectos Oriol Fernández Masgrau, Uri, que sería quien está pilotando el intento de hallar el filtraje de información en el entorno de la compañía.