La Guardia Civil ha detenido a los responsables de un centro hípico de Tarragona por tener a uno de sus empleados “en régimen de semiesclavitud”, según ha confirmado el instituto armado.
El trabajador, que ha sido liberado, se encontraba en situación irregular en el país, lo que aprovechaban los ahora detenidos para impedirle salir del recinto. La víctima, que fue captada a través de un portal de empleo, vivía en un pequeño habitáculo de las cuadras en el que se almacenaba el estiércol de los caballos.
Usaba el agua de un abrevadero
Según ha precisado la Guardia Civil el trabajador trabajaba largas jornadas, sin protección sanitaria ni medidas de prevención de riesgos laborales y para poder asearse y cocinar tenía que utilizar el agua de un abrevadero cercano.
Como consecuencia de las condiciones higiénicas deplorables, el hombre sufre varias patologías en la piel y en los ojos, pérdida de peso y problemas psicológicos. Aunque presentaba signos evidentes de enfermedad, los responsables del centro de hípica le obligaban a trabajar y manejaban su dinero.
Acusados de un delito de trata
La Guardia Civil y los Servicios Sociales han gestionado ya la protección de la víctima y las ayudas que le corresponden, como la obtención de los permisos de residencia y trabajo y una vivienda digna en la que residir.
La investigación e intervención policial se ha llevado a cabo en colaboración con la Fiscalía de Trata de Personas y Extranjería en Tarragona, la Inspección Territorial de Trabajo de Tarragona y la Fundación Cruz Blanca. A los dos detenidos se les atribuyen delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral.