Un cachorro de menos de seis meses ha muerto en Girona tras quedar colgado por la cuerda con la que estaba atado a un balcón cuando trataba de huir para resguardarse del calor.
Según ha avanzado el Diari de Girona el perro murió el lunes a mediodía tras “agonizar” a causa del fuerte calor. El animal, encerrado en un balcón sin sombra del número 3 de la calle Riu Freser habría intentado huir saltando la barandilla, pero quedó colgado por la cuerda con la que estaba atado y, finalmente, murió.
El dueño, de vacaciones
Según el citado medio el dueño del perro se había ido de vacaciones y había dejado su mascota al cuidado de un conocido que sacaba a pasear al animal tres veces al día y le daba comida y agua, pero que el resto del tiempo lo dejaba atado al balcón para evitar que saltara.
Tanto el Ayuntamiento de Girona como la Policía Municipal, que ya ha abierto una investigación para determinar si se trata de un caso de maltrato animal, aseguran que no recibieron ningún aviso por parte de los vecinos.
Otro perro rescatado de un balcón
Mejor suerte tuvo otro perro que se encontraba en una situación similar en Terrassa, al que los Bomberos de la Generalitat y la Policía Municipal rescataron de un balcón tras recibir varias llamadas de los vecinos en las que aseguraban que llevaba tres días encerrado sin agua ni comida.
Sin embargo, el dueño, sobre el que pesa una denuncia, se ha pronunciado en las últimas horas y asegura que “todo es falso”. En una conversación con el Diari de Tarragona mantiene que el animal estaba al cuidado de su cuñada y que sólo llevaba seis horas solo, un extremo que la policía niega. El dueño, que se enfrenta a 2.000 euros de multa, asegura que el perro --ahora decomisado-- se quedó encerrado en el balcón por “error” pero que tenía a su alcance agua fría y comida. “No está abandonado, no le falta de nada”, se ha defendido.