El bebé hallado sin vida este martes en la playa Costa Daurada de Roda de Berà (Tarragona) era una niña menor de seis meses que pasó entre 15 días y dos meses en el agua antes de llegar a la arena. Así lo indican los primeros datos de la autopsia que se ha practicado a los restos de la pequeña.
Los datos forenses obtenidos hasta el momento no permiten determinar nada más respecto a las causas de la muerte. En el proceso se deben buscar indicios de violencia, ya que es el procedimiento habitual, aunque desde el entorno del caso se apunta a otra prueba que será más determinante. Es el análisis del ADN de la niña, que permitirá conocer su origen étnico y confirmar si, como apuntan las hipótesis iniciales, se trata de otra víctima migrante.
Investigación en curso
El cuerpo de la menor fue localizado a primera hora de la mañana de este martes por un operario de limpieza en la playa. Los Mossos d’Esquadra acordonaron la zona, pese a que apenas había gente debido a las horas, hasta la llegada de los agentes de la Guardia Civil que procedieron
La Guardia Civil procede al levantamiento del cadáver del bebé la playa Costa Daurada de Roda de Berà (Tarragona)
El alcalde de la localidad tarraconense, Pere Virgili, avanzó una de las hipótesis que baraja la Guardia Civil, y es que la menor habría viajado en una de las embarcaciones que naufragaron recientemente en el mar Mediterráneo. Según cifras de Naciones Unidas, el primer trimestre de 2023 ha sido el más mortífero que se recuerde desde 2017, con un total de 441 muertes confirmadas.
Vecinos conmocionados
El instituto armado está practicando las gestiones pertinentes para tratar de identificar al menor y para saber en qué circunstancias perdió la vida. Lo hace bajo las directrices del juzgado de Instrucción número 7 de El Vendrell. La jueza ordenó abrir diligencias y está a la espera de recibir los correspondientes informes forenses y policiales.
Jordi González, presidente de la asociación de vecinos de la urbanización Costa Daurada, explicó que el suceso "ha impactado mucho" a los residentes de esta zona, en la que no hay mucho turismo más allá de los familiares y amigos de los propietarios. "La gente está conmocionada, apesadumbrada", relató.