Una nueva tanda de lluvias regará varios puntos de Cataluña a partir del lunes. Las tormentas y lluvias pondrán en riesgo a todas las provincias catalanas, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología.

Los chubascos tormentosos afectarán con especial intensidad al entorno pirenaico y al norte del territorio, donde podrían llegar a ser fuentes e ir acompañados de granizo. Cataluña continuará así con una incercia de lluvia que podría alargarse unos cuatro días como mínimo. 

La sequía de una tregua a Cataluña

Los pronósticos apuntan a que julio también traerá más tormentas de lo habitual. Una buena noticia para los embalses que ya se sitúan al 30% de su capacidad. Las lluvias de mayo y junio han permitido retrasar hasta octubre la entrada en situación de emergencia por la sequía, según apunto la semana pasada el director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Samuel Reyes.

Vista del pantano de Siurana, en Tarragona / Jrperise (WIKIMEDIA COMMONS)

El pantano de Sau ha pasado del 14 al 31%. El de Susqueda, en cambio, del 35 al 30. En la cuenca del Ebro, Rialb ha pasado del 8 al 14%, o Camarasa del 49 al 61% y en el de Canelles ha descendido del 17 al 15%.

Inundaciones y destrozos

Las intensas lluvias que cayeron la semana pasada dejaron inundaciones y destrozos en algunos puntos del interior de Cataluña. Una de las zonas más afectadas fue la Cataluña central. El caso más extremo fue el de Castellgalí, donde tuvieron que cortar la carretera C-55 y desviar el tráfico hacia su polígono industrial.

También han provocado el cierre de 15 playas del Maresme y del Barcelonés este fin de semana por la mala calidad del agua. El viernes por la noche, las precipitaciones dejaron cerca de 28 litros por metro cuadrado en 30 minutos.