Los Mossos d’Esquadra han presentado este martes los datos sobre violencias sexuales denunciadas en Cataluña. En lo que va de año se han registrado 1.247 casos, lo que representa un aumento de un 19% con respecto al mismo periodo del año pasado. No obstante, la policía catalana ha explicado que solo un 14% de los hechos se producen en el ámbito del ocio nocturno y niegan que haya sumisión química.
De hecho, el número de hechos perpetrados por sumisión química --aquellos casos en los que el agresor suministra una sustancia a la víctima sin su consentimiento con la intención de inhibir o anular sus capacidades-- representan solo un 1% de los casos, con 13 hechos. De estos, 10 fueron cometidos por autores conocidos por las víctimas --de su entorno familiar, amigos o pareja-- mientras que los tres restantes fueron cometidos por un desconocido. De estos hechos, 12 se registraron en los domicilios del agresor o de la víctima. “Aunque se ha creado mucha psicosis, podemos trasladar un mensaje de tranquilidad y de seguridad en el ocio nocturno”, ha confirmado el comisario Ramón Chacón.
El 90% no se denuncian
Aunque en lo que va de año las denuncias han aumentado en un 10% con respecto al año 2021 y en un 19% respecto al año anterior, la portavoz de Mossos d’Esquadra, Montserrat Escudé, ha insistido en que hay entre un 70% y un 90% de cifras ocultas.
Este año, la policía catalana ha detenido o investigado a 1.000 autores, de los que el 12,3% son menores de edad. Además, el 60% de los autores eran conocidos de las víctimas, como familiares, parejas, amigos u otras personas de su entorno. Solo en un 40% de los casos los autores y las víctimas no se conocían.
Los Mossos resuelven el 80% de los casos
Los Mossos d’Esquadra han remarcado que, de los casos que se denuncian, el 80% son resueltos con éxito. En este sentido, el comisario Chacón se ha dirigido a las víctimas: “A cualquier persona que haya sufrido una agresión sexual, que sepa que atraparemos al autor. También envío este mensaje a los agresores: os atraparemos”.
El éxito en la resolución de los casos se debe, entre otros factores, a una nueva herramienta de análisis de la información que ha incorporado la policía autonómica que les permite “destripar” cada una de las denuncias por violencia sexual que entran en las comisarías en hasta 300 parámetros. Así, se ordenan y explotan de forma lógica para desarrollar inteligencia estratégica y operativa.
Las agresiones grupales, un 4%
Con respecto a la tipología de las agresiones, en los contextos de ocio nocturno el 6% fueron tocamientos. Se eleva hasta el 10% al sumar hechos con acceso carnal en las inmediaciones de los locales y hasta un 14% al tener en cuenta aquellos casos en los que víctima y agresor fueron a casa de alguno de los dos, donde se cometió la agresión.
Este año se han registrado 58 hechos en los que ha habido más de un autor, un 4% del total. La mayoría, han aclarado los Mossos, han estado perpetrados por entre dos y tres hombres. “Un 25% tienen asociada violencia física; además, en el 43% de lo casos los autores eran conocidos, frente a un 57% de desconocidos”, han explicado. En el 26% de los casos uno actuó activamente y resto hicieron labores de vigilancia, mientras que en el 62% participaron todos.
Los depredadores, un 3%
En lo que respecta a menores, se han registrado seis hechos con más de un autor. En este caso, los Mossos d’Esquadra han explicado que algunos de estos casos se enmarcan dentro del “bullying”, en los que se busca “vejar o ridiculizar a la víctima, pero no satisfacer el deseo sexual”. En estos casos, hay que abordar el acoso escolar.
Por último, este año se han registrado 31 hechos en los que se ha observado la conducta de un depredador. Aunque supone un 3% este dato preocupa a la policía catalana porque “detrás puede haber conductas seriales”. Destaca un caso en Les Corts, donde el autor fue detenido y se encuentra en prisión, que realizaba tocamientos a mujeres y que tenía actitudes exhibicionistas.
Creación de un Área Central
El Gabinete contra las violencias sexuales, presidido por el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, y el jefe de los Mossos, Pere Ferrer, --al mismo nivel que el Gabinete de coordinación terrorista-- ha aprobado nuevas medidas para hacer frente a la situación actual. Así, la policía catalana ha anunciado que seguirá adelante con el Plan de Acción de Violencias Sexuales en el entorno del ocio nocturno, pero que incidirán en entornos infantiles, como escuelas, así como en los entornos digitales y en el ámbito intrafamiliar, donde se dificulta la detección de estos hechos.
Además, los Mossos d’Esquadra ha anunciado que convertirá la Unidad Central de Agresiones Sexuales (UCAS) en un Área Central de Agresiones Sexuales. Esto implica dotarla de un mayor liderazgo, para consolidarla como unidad de referencia en la investigación de este tipo de delitos.