Los primeros resultados de un ensayo clínico han sido prometedores en cuanto a la eficacia de una vacuna personalizada de ARN contra el cáncer de páncreas, uno de los tumores más mortíferos que existen. En España, es el séptimo cáncer más común y el tercero que más muertes causa según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica.
El ensayo, liderado por investigadores del Memorial Sloan Kettering Cancer Center (Estados Unidos), ha demostrado que la vacuna induce respuesta inmunitaria y retrasa la recaída de los pacientes en un tipo de cáncer de páncreas cuya tasa de supervivencia es del 12%, una cifra que se ha mantenido estancada desde hace casi 60 años.
Células T, las aliadas contra al cáncer
De acuerdo con estudios recientes, la mayoría de estos cánceres albergan niveles elevados de neoantígenos, un tipo de proteínas que pueden surgir en la superficie de los tumores. Estas proteínas pueden servir de ayuda en terapias vacunales con el fin de potenciar la actividad de las células T, que ayudan a combatir el cáncer.
En combinación con quimioterapia e inmunoterapia, los investigadores han descubierto que la vacuna de ARN personalizada, es decir, preparada según las características del tumor de cada paciente, provoca respuestas sustanciales de células T en el 50% de ellos.
Media de supervivencias más larga
A los 18 meses de seguimiento, los pacientes con células T expandidas gracias a la vacuna tenían una media de supervivencia más larga en comparación con los pacientes sin células T expandidas por la vacuna, unos resultados que demuestran el potencial de las vacunas individualizadas de ARN mensajero en el tratamiento del cáncer de páncreas.
La vacuna BNT122, también llamada autogene cevumeran, fue desarrollada de manera conjunta por las biotecnológicas BioNTech y Genentech antes de la pandemia. Ahora se está investigando en ensayos clínicos contra diferentes tipos de cáncer.