Este martes se celebra en la Audiencia Provincial de Barcelona el juicio contra un fisioterapeuta acusado de haber abusado sexualmente de 23 pacientes, todas ellas mujeres. Por estos hechos, la fiscalía solicita para él 93 años de prisión.
El acusado, que prestaba sus servicios profesionales tanto en su domicilio como en una clínica privada de la Ciudad Condal, estaba especializado en la práctica de tratamientos de osteopatía enfocados en el preparto y posparto.
Sin relación con los tratamientos
En su escrito de acusación, la fiscalía sostiene que entre 2013 y 2016 el acusado abusó sexualmente de 23 pacientes. El ministerio público detalla minuciosamente a lo largo del escrito los tocamientos “sin relación con los tratamientos solicitados por las víctimas” que presuntamente realizó a esta veintena de pacientes, todas ellas mujeres, para “satisfacer sus instintos libidinosos”.
En concreto, lo acusan de haber realizo tocamiento en el pubis y en los pechos a varias pacientes, de restregarle su zona genital sobre la espalda, masajearles el culo, llegando a algunas de ellas a introducirles los dedos en la vagina y el ano sin su consentimiento.
Tocamientos a 23 mujeres
En el caso de la primera víctima, explica la fiscalía, “le separó los labios vaginales, y le tocó en un punto donde le causo fuerte dolor, haciendo movimientos circulares, que la víctima no entendió”. A continuación "le introdujo un dedo dentro de la vagina, y un dedo dentro del ano”. A la segunda le hizo friegas “en la zona del pubis que la dejó en estado de shock”. A la tercera, continúa el ministerio fiscal, “le desabrochó el sujetador y le tocó los pechos de manera sensual”, además de "el clítoris".
A la cuarta mujer, “le tocó los pechos y le restregó su zona genital” por la espalda. A la quinta víctima “le metió las manos por debajo de las bragas, separándole los labios vaginales y tocándole el clítoris”. A la sexta, “le metió un dedo por el ano sin llevar ningún tipo de protección”. Así fue, según el relato de la fiscalía, como actuó con hasta 23 pacientes.
Piden su inhabilitación
Por estos hechos la fiscalía no solo solicita para él 93 años de cárcel y una indemnización de 280.000 euros a la víctimas, sino que también pide que se le inhabilite para seguir ejerciendo como fisioterapeuta una vez cumplida la pena de prisión.
Según avanzó El País el Colegio de Fisioterapeutas de Cataluña lo suspendió de forma cautelar hasta que se conozca la sentencia. En un comunicado enviado al citado medio el colegio asegura que colaboró con las autoridades y que “facilita los canales de denuncia para denunciar posibles casos de mala praxis” de los profesionales.