Novedades en la desaparición de Levi Simeon Davis, el jugador de rugby desaparecido en Barcelona desde el 29 de octubre. La madre del joven, Julie Davis, y un amigo de la familia se han reunido en las últimas horas con los Mossos d’Esquadra en la Ciudad Condal para conocer los últimos avances de la investigación. Ahora, la policía catalana sabe que el joven regresó al puerto de mercancías por su propio pie gracias al rastreo de su teléfono móvil y cree que puede estar en el mar. Fuentes del entorno han trasladado a Crónica Global que esperan que inicien una búsqueda en el agua, pero que todavía no tienen la certeza porque "se necesita una orden judicial".
En un comunicado enviado a este medio la familia expresa que los Mossos d’Esquadra han podido comprobar que tras pasar por delante del Hard Rock Café de plaza Catalunya --el último lugar en el que fue captado por las cámaras caminando con su teléfono en la mano hacia la plaza Urquinaona tras salir del Old Irish Pub-- Levi Davis volvió sobre sus propios pasos, bajó por Las Ramblas y entró en el puerto comercial de Barcelona.
Lo relacionan con el incidente en el puerto
Su móvil dio señal por última vez el 30 de octubre en una antena situada en el extremo del puerto de contenedores más cercano al mar. Esa misma madrugada cuatro miembros de la tripulación de un crucero de MSC manifestaron haber visto a un hombre en el agua pidiendo auxilio. También describieron con precisión la ropa que llevaba, que podría encajar con la que vestía Levi Davis.
Ahora, los Mossos d’Esquadra han precisado que la persona que estaba en el agua pidió ayuda en inglés --la lengua materna del jugador desaparecido-- y que se lanzó un aro salvavidas --como explicó en detalle este medio-- que fue localizado después, aunque no se encontró a la persona. Ahora, piden que la Policía Portuaria autorice nuevos registros tanto en el agua como en zonas del puerto inaccesibles.
El avistamiento en el mar
La noche en la que se esfumó Levi Davis se produjo un episodio inquietante en el puerto de Barcelona. Salvamento Martítimo detalló a este medio lo sucedido aquel día. A las 5.33 de la madrugada del 30 de octubre recibieron una alerta procedente del buque Bellissima, de la compañía MSC Cruceros, alertando de que “a un alumno de la tripulación del buque y a un pasajero les pareció ver a alguien pidiendo auxilio en la bocana Sur del puerto de Barcelona”. Por eso, lanzaron un aro salvavidas.
Desde el Centro de Coordinación de Salvamento de Barcelona se movilizaron el helicóptero Helimer 203, la Salvamar MIntaka y la embarcación de Bomberos de Barcelona, a los que se fueron uniendo la embarcación Narcís Monturiol UMME, la embarcación de Cruz Roja Port Olimpic, la Salvamar Polaris y la de Guardia Civil. Durante el operativo de búsqueda, que duró un día, se dio aviso a todos los buques del fondeadero, que confirmaron que no faltaba nadie a bordo. También se emitió un aviso de emergencia MAYDAY RELAY y se estudió una posible deriva. Después de comprobar que en el Bellissima no faltaba ninguna persona a bordo y de que los Mossos confirmaran que no había ninguna denuncia de desaparición relacionada con el ámbito marítimo en la ciudad, se canceló el operativo. Su pasaporte fue hallado días después en el puerto comercial de la Ciudad Condal.
Cabe destacar que el jugador todavía no constaba como desaparecido en las bases de datos policiales. De hecho, no figuró en ellas hasta más de una semana después. Los Mossos d’Esquadra iniciaron una búsqueda de oficio el 8 de noviembre tras enterarse de su desaparición a través de los medios de comunicación y de las redes sociales, dado que su familia no la formalizó hasta el 12 de noviembre tras viajar hasta Barcelona.