El primer trimestre del año se salda con 34 muertos en las carreteras catalanas, 28 de ellos en los meses de enero (con 14 fallecidos) y marzo (otros 14, de los cuales tres eran menores de edad). En estos tres meses han muerto dos personas más que en el mismo periodo de 2022.
Según explica el Servei Català de Trànsit, que ha facilitado el balance de siniestralidad del primer trimestre de 2023 este sábado, el incremento de víctimas en marzo se explica por el hecho de que seis de los fallecidos perecieron en dos únicos accidentes con tres víctimas cada uno en El Perelló (Tarragona) y en La Fuliola (Lleida).
Tres fallecidos menos que en 2019
Los datos del primer trimestre se han comparado con el mismo período de 2019, año previo a la pandemia y que se toma como referencia para cumplir los objetivos de reducción de siniestralidad contemplados en el Plan de Seguridad Viaria 2020-23.
Respecto al primer trimestre de 2019, se han contabilizado tres fallecidos menos y ocho accidentes mortales menos, es decir que los siniestros mortales han bajado un 22 %, y los heridos han descendido igualmente un 13,6 %, al pasar de 184 de entonces a 159 de este año (catorce más que en 2022).
Solo cuatro mujeres entre los fallecidos
De las 34 víctimas contabilizadas el primer trimestre del año, diez pertenecían a colectivos vulnerables: cuatro eran peatones y ocho eran motoristas, seis de los cuales fallecieron en marzo, justo el doble que en el mismo mes de 2022.
Por sexos, eran hombres 30 de los fallecidos (18 conductores, ocho pasajeros y cuatro peatones) y cuatro eran mujeres (una conductora y tres pasajeras), una diferencia que se mantiene en cuanto a los heridos (118 hombres y 41 mujeres).
La mayoría de accidentes, en fin de semana
Respecto a la tipología de los siniestros, siete de los 28 accidentes mortales han sido salidas de vía y accidentes con un solo coche implicado y el resto han consistido en colisiones con más de un vehículo implicado, once de ellas choques frontales.
El 53 % de las víctimas mortales (18 de las 34) se han registrado durante los fines de semana o el día previo a un festivo y, por provincias, Barcelona ha tenido 13 víctimas mortales, Tarragona nueve, Lleida ocho y Girona cuatro. En esta última provincia ha bajado significativamente el número de fallecidos respecto a los diez del mismo período del año pasado, al contrario que en Lleida, donde han subido de dos a ocho.