Los Mossos confirman que las gemelas de Sallent fueron víctimas de ‘bullying’

Las gemelas de Sallent fueron víctimas de bullying en el instituto donde estaban escolarizadas, tal y como apuntaba la familia desde un principio. Lo confirman los Mossos d'Esquadra en su atestado sobre el caso, donde señalan al acoso escolar como uno de los factores que llevó a las hermanas a precipitarse al vacío desde un tercer piso.

Mofas, burlas... un acoso que empezó en el colegio de la escuela primaria y que continuó en el Instituto Llobregat, donde cursaban primero de la ESO. Tanto las cartas que las dos menores dejaron en su casa antes de saltar, como el testimonio del entorno, ya apuntaba a que ambas sufrían acoso tanto por su nacionalidad argentina como por el hecho de que una de ellas, Alana, solicitara que se dirigiesen a ella como Iván.

Alana podría haber tomado la decisión

Fuentes de la investigación creen que Alana fue quien tomó la decisión de quitarse la vida saltando desde el balcón del tercer piso en el que vivían en la calle Estació de Sallent. Fue su hermana, Leila, que, como muestra de apoyo incondicional, se arrojó al vacío junto a ella.

Alana no sobrevivió a la caída mientras que Leila fue estabilizada por los servicios médicos y trasladada al hospital Parc Taulí de Sabadell, donde continúa ingresada en estado muy grave, aunque no se teme por su vida. Ahora, hay que esperar a ver cuál es la evolución de la pequeña y fijar los protocolos pertinentes para garantizar su cuidado físico, pero también psicológico.

El informe policial no identifica a ningún responsable

En un primer momento el Departamento de Educación descartó que la causa del suicidio fuese el acoso, dado que no habían saltado alarmas durante las visitas psicológicas que las dos menores recibían. Sin embargo, este jueves el departamento rectificó y expresó que no se podía descartar ninguna hipótesis. Tampoco el bullying.  

Ahora, tal y como avanza La Vanguardia, el informe que la policía catalana entregó al juzgado de Manresa que instruye la investigación de los hechos, señala claramente el acoso escolar como una de los motivos del suicidio, aunque no identifica a ningún responsable.

Ocultaron el acoso a su familia

En declaraciones a Telecinco, el abuelo de las dos niñas confirmó que las menores ocultaron que sufrían bullying a su familia, pero que lo plasmaron en los manuscritos que dejaron antes de arrojarse desde el balcón de su casa. Además, añadió que las dos salían todos los días disgustadas del instituto.

La madre de uno de los compañeros de clase de Alana y Leila, mencionó que su hijo le comentó que se burlaban de ellas por su acento argentino y que, recientemente, los ataques fueron en aumento después de que Alana se presentara frente a sus mejores amigos como Iván.