Un centenar de agentes de los Mossos d'Esquadra han irrumpido por sorpresa esta madrugada en la conocida discoteca Waka Sabadell, en Sant Quirze del Vallès (Barcelona), para hacer una macro redada, que se ha saldado con 906 personas identificadas, 10 denuncias por tenencia de drogas y una por falta de respeto a la autoridad.
Una vez en el local, sobre las 2:30 de la madrugada, la policía catalana ha parado la fiesta e informado a todos los presentes por megafonía que se trataba de un dispositivo policial, por lo que tanto clientes como empleados serían identificados. El operativo ha finalizado pasadas las cinco y media de la madrugada, según fuentes policiales.
Sin grandes incidentes
Durante la intervención, en la que, además de equipos del ARRO y agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USC) de la comisaría de Sabadell, han intervenido guías caninos, se han requisado pequeñas cantidades de droga a una decena de personas, mientras que otro clientes la han tirado al suelo al percatarse de la presencia policial, según ha avanzado el Nacional y corroborado Crónica Global.
Así, si bien no se le puede imputar a nadie, con el rastreo de los perros policía se puede recuperar y hacerlo constar en el informe de la entrada en la discoteca. Según fuentes de los Mossos, durante el despliegue no se ha producido ningún incidente grave, más allá del descontento de los jóvenes por haberse ido al traste la noche fiesta.