Dos participantes del chat de La Manada de Castelldefels salieron del grupo al conocer las denuncias

Los cinco detenidos en Castelldefels por orquestar de forma organizada violaciones en grupo de chicas a las que captaban a través de una aplicación de citas no estaban solos en el grupo de Whatsapp en el que se jactaban de las agresiones. Al menos había dos personas más: un testigo que en el mes de marzo de 2022 decidió abandonar el grupo por miedo a ser detenido o condenado y otro que lo hizo cuatro días antes de que la policía catalana detuviera a la ya conocida como Manada del Baix Llobregat.

El primero de los testigos contó ante los Mossos d’Esquadra que había más amigos de los acusados en el grupo de Whatsapp donde los ahora detenidos comentaban las violaciones, llamado K-Team. Sin embargo, él decidió abandonarlo en marzo "para evitar posibles problemas con la policía o de tipo judicial", después de leer algunas conversaciones en las que los presuntos violadores mencionaban la primera denuncia interpuesta contra ellos por parte de una de las víctimas.

La Manada de Pamplona, el icono

El chat, en el que los cinco investigados alardeaban de las violaciones grupales y se mofaban de las víctimas, llegó a tener como foto de perfil la imagen de La Manada de Pamplona, según ha relatado este testigo frente a los investigadores. También corroboró que dos de los detenidos eran los encargados de captar a las chicas a través de apps de citas como Tinder o Badoo a las que posteriormente violaban. 

Un segundo testigo, amigo de uno de los acusados, ha corroborado este testimonio al constatar que llegaron a tener de foto en el chat al grupo de violadores que agredieron sexualmente a una joven en los Sanfermines de 2016, un hecho que le pareció “una barbaridad”. 

Sabían que una de las víctimas sufría discapacidad

Sobre las víctimas han explicado que sabían que, al menos una de ellas, sufría una “discapacidad o enfermedad degenerativa” y que en el grupo de Whatsapp expresaron que “le habían dado por todos lados”. Este segundo testigo, que abandonó el grupo solo cuatro días antes de que los cinco investigados fueran arrestados, se presentó en la comisaría de Mossos d’Esquadra para declarar sin su móvil. Casualmente, según su versión, se lo dejó en casa cargando. 

El testigo ha narrado que se fue del grupo tras conocer que otras mujeres habían presentado denuncias contra sus amigos. Según los testigos, el grupo K-Team se creó porque todos ellos se conocían de Castelldefels y salían juntos de fiesta. 

Seguirán en prisión

La jueza instructora de Gavà (Barcelona) envió a prisión sin fianza a los cinco presuntos autores. Aunque la defensa de los acusados recurrió el auto de prisión, la Audiencia de Barcelona decidió mantener en prisión a los presuntos violadores al considerar que no solo existe un riesgo de fuga sino que suponen un peligro para las víctimas. En este sentido, el tribunal alegó que, tras violar a las chicas las “tanteaban” para asegurarse de que no denunciarían en su contra. Este hecho ha motivado que permanezcan en prisión para proteger a las mujeres. 

Les atribuyen la violación de tres chicas en la primavera de 2021 en el piso de Castelldefels donde vivía uno de ellos. No obstante, tanto la jueza que lleva el caso como los Mossos d'Esquadra creen, tras leer los cientos de mensajes que se intercambiaron los presuntos autores, que hay más víctimas que todavía no han sido identificadas.