La Guardia Urbana ha abierto diligencias para examinar una marcha de unos 2.000 moteros que han circulado hoy por las calles de Barcelona vestidos de Papá Noel. El motivo de la concentración era la Papanoelada Motera 2022, cuyo objetivo era recoger juguetes para llevarlos a Sant Boi con fines benéficos.
Sin embargo, la convocatoria no contaba con los permisos municipales y ha sido boicoteado por el ayuntamiento. En las horas previas a la celebración del evento, los organizadores han considerado una "vergüenza" las trabas impuestas por el consistorio --frente a otros como Badalona y otras ciudades de España que lo apoyan-- y el desmarcamiento en el último momento de organizaciones participantes como los bomberos, aunque ha llamado a la calma a los asistentes porque, aseguraba, no es ningún delito circular por la carretera en moto.
Alertan a Mossos
Entre 1.500 y 2.000 motoristas vestidos de Papá Noel han recorrido el centro de Barcelona este domingo para celebrar la Papanoelada Motera 2022, aunque la Guardia Urbana ha abierto diligencias por no haber comunicado la concentración. Según ha informado la Guardia Urbana, los motoristas han entrado en la ciudad por la Gran Vía, procedentes de L'Hospitalet de Llobregat, y han atravesado el corazón de la ciudad con los vehículos engalanados con motivos navideños.
La policía municipal ha abierto diligencias por no haber comunicado la concentración y levantará acta si los moteros cometen alguna irregularidad. Además, está en contacto con los Mossos d'Esquadra, prestando especial atención a la afectación al tráfico de la convocatoria y las infracciones que puedan cometerse.
El síndic antimotos
El síndic de greuges de Barcelona, David Bondia, pidió el pasado viernes al Ayuntamiento que adoptara "medidas cautelares" e impidiera la Papanoelada Motera, por ocupar la vía pública sin permiso, incumplimientos en seguridad viaria y contaminación. Sin embargo, las entidades convocantes, Satan Rider y K-Choppo Riders Barcelona, habían decidido ayer mantener la convocatoria con el objetivo de recoger juguetes para niños desfavorecidos.
Fuentes municipales señalaron que una concentración de motos de este tipo puede provocar un aumento de más de tres decibelios sobre el ruido de fondo de la ciudad, lo que causa "importantes" molestias acústicas y, además, supone un exceso de emisiones de contaminantes a la atmósfera. Por su parte, Satan Rider ha lamentado la falta apoyo que han recibido y señaló que otras concentraciones de motos, como la organizada en Badalona, sí que cuentan incluso con el apoyo del ayuntamiento.