Sanidad financia el primer espray para tratar las depresiones más graves
Spravato se utiliza desde hace meses en el hospital Vall d'Hebron para los casos más extremos cuando los pacientes no responden a ningún otro tratamiento estándar
7 noviembre, 2022 10:05El Ministerio de Sanidad ha dado luz verde a financiar el uso de esketamina para pulverización nasal para tratar las depresiones más graves. El producto, llamado Spravato --de Janssen-- se utilizará en aquellos casos más extremos, cuando los pacientes no respondan a ningún otro tratamiento estándar.
La Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos (CIPM) ha tomado esta decisión después de que lo haya rechazado hasta en dos ocasiones a lo largo de 2022 por motivos de “racionalización del gasto público e impacto presupuestario del SNS, así como las incertidumbres respecto a su valor terapéutico”.
Vall d'Hebron, hospital de referencia
Así pues, desde el Ejecutivo han aprobado la financiación de este medicamento que ya se utiliza desde hace meses en el hospital Vall d’Hebron de Barcelona, centro que ya ha comprobado su eficacia. Según el jefe del Servicio de Psiquiatría, Josep Antoni Ramos-Quiroga, el producto hace un efecto muy rápido, en 24 o 48 horas, en el 76,5% de los pacientes. “Podemos obtener respuesta desde el primer día y ésta se mantiene en el tiempo”, explicó el doctor en una entrevista en El Farmacéutico Hospitales.
Pero no es un medicamento que pueda utilizar todo el mundo. En este sentido, los profesionales destacan que es una medicación que se debe prescribir en casos concretos y bajo supervisión médica debido a los efectos secundarios que tiene. El aumento de la presión arterial es el principal, sumado al dolor de cabeza, sensación de mareo y síntomas disociativos.
Pacientes con mayor riesgo de suicidio
Pero ¿qué es la depresión mayor? Es el tipo más grave de depresión y que se caracteriza por no notar una mejora pese a recibir dos tratamientos antidepresivos de forma consecutiva, de entre cuatro y seis semanas cada uno. Se trata, sobre todo, de pacientes con el mayor riesgo de suicidio inminente de todo el espectro de los trastornos depresivos.
“Hacía muchísimos años que no teníamos, en el campo de la salud mental, una innovación que supusiera tal revolución en el mecanismo de acción y en los desafíos que cubre --rapidez de acción, tolerabilidad y eficacia-- con respecto a las opciones disponibles fuera de indicación. Es una luz de esperanza que, sin duda, supone un antes y un después en el tratamiento de la DRT”, explica Ramos, que recuerda que "son pacientes con un grado de sufrimiento tan profundo, que el riesgo de suicido inminente es elevadísimo”.