Los catalanes recuperan la fiesta de la castañada con energías renovadas. Mucha ilusión y ganas de celebrar una tradición que, como muchas otras, se vio afectada por las restricciones de la pandemia de la Covid-19.
Así, en vista de la evolución de estos días, el sector de ocio nocturno de Cataluña prevé la mayor facturación de 2022 que superará, incluso, la de la noche de Fin de Año. Concretamente, se espera generar unos ingresos un 10% superiores a los de 2019.
Castañas y boniatos
El Ayuntamiento de Barcelona ha concedido este año un total de 43 licencias para instalar puestos de venta castañas y boniatos en los distintos distritos de la ciudad. Así lo ha comunicado el consistorio este sábado, añadiendo que la licencia de ocupación de la vía pública para vender estos productos se concede del mes de octubre hasta el mes de marzo.
El origen de festividad se remonta a los banquetes funerarios del siglo XVIII donde se degustaban frutos secos, legumbres y panes votivos que, posteriormente, darían lugar a los famosos panellets. Así, los asistentes asaban castañas para sentirse en comunión con sus difuntos. Este año, podrán encontrar 14 puestos de castañas en Sant Martí, 5 en Nou Barris y Ciutat vella y Eixample, Sarrià-Sant Gervasi, Gràcia, Sant Andreu y Sants-Montjuïc con 3 cada uno mientras en les Corts y Horta-Guinardó se han instalado dos.