La Consejería de Salud ha dilatado la entrega de la documentación sobre el caso de la niña de cuatro años que sufrió un presunto error médico en el Hospital de Calella. La Síndica de Greuges ha apercibido al Departamento de Josep Maria Argimon para que entregue los documentos del episodio, pues se ha pasado el "plazo legal" que tenía para hacerlo.
Así lo indica un comunicado de la oficina de la defensora del pueblo catalán al que ha accedido este medio. Esther Giménez-Salinas alerta a la familia de E. de que "ha pedido a la Administración afectada un informe y la documentación del caso". Los datos, no obstante, "no se han recibido y se ha superado el plazo legal para responder". Por ello, el equipo "ha reiterado [...] esta solicitud y el envío de la información, a la vez que se le ha recordado el deber de facilitarla".
Síndic: "Tienen 15 días más"
Una portavoz de la Síndica de Greuges ha precisado que "de acuerdo con la Ley del Síndic, las administraciones tienen 15 días para enviar la información requerida". Pero si no lo hicieran, este plazo "es prorrogable 15 días más". Este es tiempo de que aún dispone Salud para remitir el informe y el expediente del caso.
La norma que regula el defensor del pueblo autonómico, no obstante, precisa que el plazo extra depende de "las circunstancias concurrentes". No se trata del plazo legal establecido, sino de una prórroga en función de cada queja ciudadana.
Calella se remite a Salud
En cuanto a los portavoces del Hospital de Calella, señalan que el proceso administrativo remite a la administración competente, que en este caso es la Consejería de Salud. Preguntado por la cuestión, el departamento no ha contestado.
Cabe recordar que el proceso de investigación abierto por la Síndica es paralelo a otros dos. Por un lado, la reclamación de la familia la gestionará el Servicio Catalán de Salud (CatSalut). Por el otro, el de la Fiscalía de área de Mataró, que ha abierto diligencias por si concurrieran indicios de ilícito penal, como explicó este medio.
Posible negligencia
Las pesquisas del ministerio público llegan después de una queja de la familia a El Defensor del Paciente. Los allegado de E. alertan de que acudieron al Hospital de Calella con su hija el 21 de octubre de 2021 con un cuadro de fiebre alta y el cuello ladeado.
El servicio de Urgencias del centro sanitario comarcal la envió a casa pese a que el análisis de sangre que le hicieron salió "muy alterado". Tras ello, la niña empeoró y su madre y su padre la llevaron de madrugada al maternoinfantil de Sant Joan de Déu.
Operada a vida a muerte y en coma
En esta ciudad sanitaria, E. tuvo que ser sometida a una operación de vida y muerte. El equipo médico le detectó un absceso retrofaríngeo, una infección en los ganglios que puede ser potencialmente mortal en los enfermos pediátricos si no se trata a tiempo, como consideran que ocurrió en este caso.
La pequeña salvó la vida, pero pasó 15 días en coma inducido. Durante ese tiempo en cuidados intensivos, se contagió de una neumonía y estuvo a punto de fallecer de nuevo. Los padres alertan de que las consecuencias para la paciente y para ellos fueron "devastadoras" y apuntan a un posible "error médico" en Calella, que ahora se investigará por la doble vía, judicial y administrativa.