El Hospital de Palamós ha encajado una condena por la muerte de un feto a cuya madre, que lidiaba con un embarazo prolongado, retrasó el parto por diversos motivos. El centro sanitario ha pagado 145.000 euros por falta de diligencia debida. 

Lo ha avanzado El Periódico y lo ha precisado Bufete Legal Verdún, que dirige el letrado José Aznar Cortijo, que ha señalado que la conformidad evita una demanda por el fallecimiento del nonato. La aseguradora del hospital, Zurich, se hará cargo de la compensación. 

Retraso

Los hechos ocurrieron en 2016. Aquel año, la afectada quedó embarazada en febrero y el parto se fijó para el 9 de noviembre. Pero el 4 de noviembre, la gestante, que estaba de 39 semanas y tres días, acudió al hospital con dolores. Volvió los días 8, 11, 13 y 14 de noviembre con el mismo cuadro, aunque empeorado. Al día siguiente, la paciente presentaba contracciones

La barriga de una mujer con un feto en su interior / PIXABAY

Los médicos le dieron cita para el día 16 de noviembre, aunque en aquellas fechas la mujer ya había entrado en la semana 41 de embarazo, en la que se recomienda inducir el parto. Los sanitarios no lo hicieron, y la citaron para dos días después. Cuando llegó a la nueva visita, el feto había muerto. 

Asfixia

La necropsia indica que el nonato falleció por asfixia por líquido meconial. Ello se podría haber evitado si se hubiera inducido al parto. No pasó, y no se informó a la paciente de que estaba en riesgo. 

Con esta estrategia asistencial, el Hospital de Palamós contravino las indicaciones del Hospital Clínic Barcelona y las de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO). 

Zurich pagará, Sham sigue

La mala praxis médica la ha asumido Zurich, que cubría a los médicos catalanes hasta que se retiró en 2017, como explicó este medio

Oficinas de Zurich en Barcelona / GOOGLE

La sustityó la francesa Sham, que acaba de renovar el contrato conjunto entre el CatSalut, ICS y Consejo de Colegios de Médicos.