El Govern ha dado un paso al frente para tratar de desencallar el conflicto laboral con la comunidad educativa. La Consejería de Empresa y Trabajo, encabezada por Roger Torrent, ha convocado a los sindicatos a una reunión este miércoles por la tarde para volver a negociar los puntos que les llevaron a convocar una nueva huelga de varios días durante el mes de junio.
Ambas partes volverán a sentarse en una mesa el día de antes de que se produzca una jornada de paro parcial de ocho a diez de la mañana. Y lo hace, también, en plena polémica tras la aprobación del nuevo decreto ley que dicta instrucciones a los centros educativos para que revisen, modifiquen y adapten los proyectos lingüísticos sin contemplar porcentajes, como sí reclama la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
Una reunión para "ganarse" a los sindicatos
Las fuentes sindicales consultadas por Crónica Global consideran que la Generalitat ha movido ficha solamente para decir que han hecho algo. Además, creen que se trata de una estrategia de la Conselleria de Educación, liderada por Josep Gonzàlez-Cambray, para "ganarse" a unos sindicatos que están en pie de guerra desde hace meses por su gestión. Algo que, por ahora, consideran que están lejos de conseguir. "Ante el desafío al TSJC, necesitan la complicidad de la comunidad educativa", avisan. El encuentro está previsto que se produzca en la Conselleria de Trabajo a las cuatro de la tarde.
"Esperamos conseguir alguna mejora y que podamos negociar", dicen desde Ustec. Sin embargo, tienen pocas esperanzas, sobre todo teniendo en cuenta las reuniones previas. De hecho, fue el Departamento quien rompió las negociaciones tras el último rechazo de la parte social a aceptar la reducción de la hora lectiva solamente en la primaria. Consideran que las mejoras laborales deben llegar para todas las etapas educativas por igual, también para la secundaria.
Por su parte, Xavier Massó de Profesores de Secundaria también es poco optimista. Cree que la Generalitat ya ha demostrado que "no tiene ninguna intención de moverse" y que el encuentro de este miércoles no se traducirá en mejoras. "Simplemente quieren cubrir el expediente".
No será un inicio de curso tranquilo
Si el Govern no desencalla el conflicto laboral, los sindicatos lo tienen claro: seguirán convocando huelgas y el inicio de curso en septiembre "no será tranquilo". "Si para el curso que viene no se han puesto soluciones encima de la mesa comenzaremos las clases igual o peor que ahora".
Por eso, esperan que el Ejecutivo autonómico "se ponga la pilas" para evitar un nuevo "caos" en la vuelta de las vacaciones de verano.