Este martes declarará ante el juzgado de instrucción número 4 de Igualada la menor que fue víctima de una brutal violación el pasado 1 noviembre cuando regresaba a su casa después de asistir a una fiesta de Halloween en la discoteca Epic, en el polígono industrial de Les Comes. No obstante, la joven no declarará físicamente en los juzgados, sino que lo hará mediante una videollamada para no tener que desplazarse.
La declaración será complicada para la menor, que tendrá que revivir la violación que le dejó graves secuelas tanto físicas como psicológicas. La menor se pasó más de un mes ingresada en el hospital Sant Joan de Déu de Barcelona por las lesiones que le infligió el presunto autor de los hechos, Brian Raimundo C. M., por las que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente hasta en cinco ocasiones. Además, perdió el 90% de la audición de un oído y parte de la visión.
La declaración de la exnovia
El lunes fue el turno de la exnovia del presunto agresor sexual. La que fuera pareja del ahora detenido ratificó ante el instructor la primera versión que dio de los hechos. La chica describió a Brian Raimundo C. M. como una persona agresiva y violenta.
Por los episodios que relató la joven ante el tribunal, el juzgado ha decidido abrir un nuevo procedimiento de oficio en contra del investigado para determinar si podrían ser constitutivos de un delito. Como muestra de la frialdad del detenido, la exnovia ha recordado que el que era su pareja le regaló la chaqueta que le robó a la víctima tras violarla.
El testimonio del camionero
El lunes también declaró el camionero que encontró a la chica, malherida y semidesnuda, en el polígono industrial de Les Comes. El testigo ha relatado ante el juez que se la encontró en posición fetal y que, como estaba inconsciente, inicialmente pensó que se trataba de un maniquí. Cuando se acercó comprobó que la chica sufría un traumatismo craneoencefálico y que estaba tiritando, por lo que la cubrió con su chaqueta y llamó a emergencias.
La joven fue víctima del ataque en el trayecto que hizo entre la discoteca Epic y la estación de tren de Igualada. Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad han permitido constatar que el joven –sobre el que ya pesaba una denuncia por abusar de su hermana de siete años—la persiguió durante varios minutos antes de agredirla con una barra de hierro y violarla.