Parque Geológico y Minero de la Cataluña Central: pasión por el geoturismo
El interior de la comunidad esconde un secreto que hace millones de años estaba sumergido; el parque engloba gran cantidad de municipios y revela la existencia de antiguo mar
29 mayo, 2022 10:25Aunque hoy no quede ni rastro de ello, el centro de Cataluña estuvo inundado por un antiguo mar lleno de vida. Fue hace 36 millones de años y el regalo de ese pasado remoto es el actual Parque Geológico y Minero de la Cataluña Central.
Sus 1.250 kilómetros cuadrados esconden pueblos, riberas de ríos y un sinfín de secretos que todo amante del geoturismo tiene que descubrir. Cuevas que eran barreras de coral, montañas de sal ocultas a simple vista y fósiles marinos en los picos más altos crean una experiencia que no hay que perderse.
El parque geológico de Cataluña
Reconocido como patrimonio por la Unesco, el territorio que hoy ocupa el Geoparc reúne municipios históricos del Bages, el Moianès y el Baix Llobregat. A lo largo de este territorio se suceden las cuevas, las montañas y las llanuras que un día albergaron el desaparecido mar.
Hoy es uno de los escenarios favoritos de los amantes de la naturaleza. Su territorio está repleto de rutas de senderismo o cicloturismo. Es más, desde las Administraciones de Turismo de Cataluña se han incentivado cada vez más actividades en este espacio.
Todas se han articulado en torno a una de las tendencias del turismo activo, el geoturismo. En pocas palabras, se trata de la búsqueda de recursos minerales y fósiles como forma de diversión.
Lo que ha hecho que el Geoparc sea el escenario perfecto para esta actividad es la abundancia de estos restos. Desde las llanuras centrales hasta conjuntos montañosos como el de Montserrat, es fácil verlos a simple vista.
Todo ello, por supuesto, acompañado de un patrimonio monumental que alberga algunos de los sitios más emblemáticos de Cataluña, como, por ejemplo, el castillo de Cardona.
Monumentos, geología y minería reclamo turístico
El parque geológico admite todo tipo de experiencias, pero hay tres visitas que tienen que sobresalir por encima de las demás. En ellas se une la monumentalidad de la zona con el geoturismo más genuino.
La primera es la del macizo de Montserrat. Los escarpados picos de esta zona no lejana a Barcelona son un espectáculo. Las formaciones minerales han tardado millones de años en alcanzar su actual majestuosidad. Además, hay rutas de senderismo y cicloturismo que están muy bien delimitadas, por lo que son fáciles de seguir.
Otra de las paradas esenciales debe ser la de Cardona. Primero por su espectacular castillo medieval, pero lo más importante aquí es la geología. Cardona esconde la conocida Montaña de Sal, una herencia directa de ese antiguo mar que inundaba la zona. Hay que descender unos metros por grutas repletas de vetas y pliegues de la tierra para encontrar esta increíble formación.
El tercer punto clave son las cuevas del Toll. Situadas en Moià, el amante de la geología y la historia las disfrutará de una forma muy especial. Estas formaciones son las antiguas barreras de coral del mar. Ver en su superficie los restos fósiles de algunas especies es realmente sencillo, por lo que se trata de una experiencia única.
Pero las cuevas del Toll tienen más que enseñar. En la Cataluña prehistórica, fueron el refugio de los habitantes de la zona. Restos arqueológicos y pinturas rupestres cuentan una historia milenaria que resulta fascinante.
Manresa, el corazón del Geoparque
Si los puntos ya señalados son interesantes, Manresa requiere un espacio propio. La ciudad es el auténtico corazón de esta zona y una parada obligada para todo el que quiera saber qué es el geoturismo y vivirlo en primera persona.
Una visita esencial es la del Museo de Geología Valentí Masachs. En este recinto de la ciudad se puede conocer de cerca toda la riqueza que alberga el parque, y es que su colección es espectacular. Hablamos de nada menos que 5.000 tipos de minerales, más de 2.000 rocas y hasta 3.000 fósiles de especies que vivieron en la región. Son muchos los eventos que se llevan a cabo aquí y que están preparados para dar a conocer a todos la riqueza del parque.
Manresa tiene otros espacios destacados para el geoturista. Alrededor de la ciudad se encuentran unas cuevas que pueden dar fe de la riqueza geológica de esta zona. La más destacada, por belleza y por historia, es la cueva de San Ignacio. En ella se encerró Ignacio de Loyola 11 meses en un retiro en el que entró en contacto con la naturaleza local.
El parque de Cataluña Central muestra que el geoturismo es una opción realmente interesante para todos. Especialmente para los que buscan alternativas activas con las que poder explorar de forma diferente el interior de Cataluña.