El Pride Barcelona vuelve a 2019. Los organizadores de la gran fiesta del colectivo LGTBIQ+ dan por enterrada la pandemia y han preparado una celebración que pretende alzarse como insignia del Mediterráneo en 2022. Entre las novedades destaca una verbena de San Juan enfocada en la “diversidad”. El macroevento amplía sus fechas del 13 al 25 de junio con diferentes actividades culturales, sociales y lúdicas que irán orientadas a la campaña de concienciación y visibilización lésbica bajo el lema #Bollomami.
La bandera rosácea inundará esta “fiesta mayor de la diversidad”, como la ha definido el presidente del comité organizador del Pride, Ferran Poca. Con ella, se pretende dar visibilidad a una parte del colectivo, la lésbica, que sufre una doble discriminación: por mujer y por homosexual. “Las lesbianas siguen siendo invisibilizadas, ya sean trans o no binarias, por el sistema helocentrista y homopatriarcal”, ha señalado la directora de área social y relaciones con entidades, Maria Giralt. Un símbolo de protesta que aterrizará en Barcelona para recordar la Revuelta de Stonewall el 28 de junio de 1969.
Manifestación, reivindicación y conciertos
El 13 de junio comenzará el Orgullo de 2022 con diferentes conferencias y talleres sobre la visibilidad lésbica. Pero no será hasta el día 22, con el pregón del Pride --a cargo de Aida Domenech (Dulceida)--, cuando comenzará la gran fiesta del colectivo que lleva dos años paralizada por la pandemia. El sábado 25 volverá la manifestación multitudinaria donde marcharán las tradicionales carrozas desde el parque de las Tres Chimeneas hasta la avenida María Cristina, recorriendo el Paral·lel.
Pero, en estas jornadas festivas, los organizadores han querido iniciar una nueva propuesta el 25 de junio que espera repetirse en las siguientes ediciones: una verbena de San Juan LGTBIQ+ en el Eixample. Esta se enclavará entre las calles Diputació y Casanova. Este día y el anterior, el 24, serán las fiestas grandes con actuaciones del grupo AQUA, Javiera Mena o la sorpresa de WRS, los representantes de Rumanía en Eurovisión de este año con el tema viral Llámame.
“Alarmismo”
La campaña de 2022 también pretende dar un toque de atención a las 35 entidades que trabajan en la organización del Pride. De hecho, de estas tan solo dos o tres están presididas por mujeres. Pero tampoco dejarán pasar otros problemas como “el registro como madres” si no están casadas o “los protocolos de atención médica y ginecológica”, según ha explicado Katty Pallàs, en representación de este colectivo.
Pero el “alarmismo conjunto” al que ha hecho referencia Poca no solo iba encaminado a esta campaña que invisibiliza a esta parte del colectivo, sino a la viruela del mono. “Los casos son los que son y están circunscritos a temas muy concretos y no creo que haya ningún tipo de repercusión en el Pride”, ha sentenciado. Los organizadores piden no relacionar esta enfermedad con la comunidad homosexual para no estigmatizarla de forma innecesaria, algo que puede crear, según Giralt, un efecto discriminatorio "sin ningún fundamento científico".