El verano de mayo toca fin. La subida de las temperaturas comienza a remitir en toda Cataluña, donde se viene un cambio de tiempo. El lunes será suave, pero a partir del martes se espera el regreso de las precipitaciones. Meteocat incluso ha registrado una alerta amarilla en las comarcas del Ripollès y la Garrotxa, en el centro del territorio, por la intensidad de los chubascos, que irán acompañados de tormenta y granizo.
El paraguas será necesario para todos los catalanes, ya que las precipitaciones se expandan al resto del territorio. En el Pirineo volverá a nevar y se espera que la cota de nieve baje a los 1.800 metros en la vertiente norte de la cordillera.
Bajan las temperaturas
Los termómetros dejarán atrás los registros de calor extremo del fin de semana. Solo se librará una pequeña parte del territorio: en el tercio sur la temperatura media será similar o ligeramente más alta.
Este lunes, las temperaturas oscilarán entre 10º y 29º en el Pirineo y el Prepirineo; registrarán en 12º y 31º en el interior de las provincias de Lleida, Tarragona y Barcelona, y marcarán entre 14º y 29º en la costa.
Visibilidad buena
La costa también se despide de los bancos de niebla que dificultaron la navegación la semana pasada. Salvo en los momentos de chaparrón, la visibilidad será buena en todo el territorio.
La autonomía espera rachas de viento flojas. En el Alt Empodà y Terres de l’Ebre se esperan golpes fuertes por la mañana.