Edificio incendiado en Santa Coloma de Gramenet, que ha acabado con la vida de tres personas / STREET VIEWS

Edificio incendiado en Santa Coloma de Gramenet, que ha acabado con la vida de tres personas / STREET VIEWS

Vida

Los vecinos del edificio incendiado en Santa Coloma pasarán esta noche fuera de casa

Según fuentes del ayuntamiento, todavía "no se dan las condiciones" para que regresen a sus hogares tras el fuego

4 mayo, 2022 16:12

Los vecinos afectados por el incendio del número 23 de la calle Sant Joaquim de Santa Coloma de Gramenet no podrán volver hoy a sus casas. Según ha podido saber Crónica Global a través de fuentes del ayuntamiento, todavía "no se dan las condiciones" para que regresen a sus hogares.

El consistorio sigue pendiente de recibir el informe de investigación de los Mossos d'Esquadra y los Bomberos de la Generalitat, que buscan indicios para descubrir si el fuego ocurrido la madrugada de este miércoles --poco antes de las cinco-- ha sido provocado. Asimismo, se prevé la necesidad de realizar trabajos de acondicionamiento antes de que los afectados puedan regresar. No obstante, se habilitará un dispositivo para que los vecinos puedan recoger sus pertenencias básicas.

Un agente de la Guardia Urbana corta la calle en el lugar del incendio en Santa Coloma de Gramenet / NC

Un agente de la Guardia Urbana corta la calle en el lugar del incendio en Santa Coloma de Gramenet / NC

La policía catalana trabaja con esta hipótesis ya que las llamas se han iniciado en dos lugares: en el cuarto de contadores de luz, situado en la planta baja; y en la segunda planta. Asimismo, los vecinos dan alas a la tesis inicial del cuerpo de policía catalán por los problemas de convivencia que aseguran que existían en el edificio.  

Problemas de convivencia

De hecho, la presencia de los agentes, tanto de Mossos como de la Policía Local, era habitual en la finca. Incluso la alcaldesa de la ciudad, Núria Parlón, ha confirmado que tenían constancia de los problemas entre los residentes. La propiedad del edificio es "una inmobiliaria de Barcelona", en palabras de la socialista, que había accedido a brindar alquileres sociales a los okupas que hacía años que residían en el edificio.

Los vecinos explican que algunos de estos individuos eran los conflictivos y que las peleas eran constantes. Las amenazas no solo eran verbales, por lo que muestran el convencimiento de que detrás del incendio está este conflicto vecinal.